- La bodega vallisoletana, una de las más punteras de la D.O. Rueda y premiada en numerosas ocasiones por sus blancos monovarietales, lanza la nueva añada de uno de sus vinos más especiales: Castelo de Medina Fermentado en Barrica, un 100 % Verdejo para grandes ocasiones.
- Castelo de Medina Fermentado en Barrica 2020 sale al mercado en una edición limitada de 4.000 unidades que luce una renovada imagen de marca: el dibujo de la etiqueta color plata representa un reloj, símbolo del tiempo que pasa el vino en las barricas de madera hasta que alcanza toda su complejidad.
- Con reflejos dorados y verdosos, aromático y graso en boca, su largo postgusto redondea la gran estructura de este vino, fermentado en barricas nuevas de roble francés durante seis meses.
Ubicada en Villaverde de Medina (Valladolid), Castelo de Medina es una de las bodegas más innovadoras y punteras de la D.O. Rueda, donde cuenta con más de 180 hectáreas de viñedo propio con una edad media de 30 años, edad que garantiza la plenitud de las cepas y determina la alta calidad de las uvas. Un pequeño porcentaje de ese viñedo está plantado con las variedades tintas Tempranillo, Syrah y Garnacha, mientras que el 96 % de su extensión lo ocupan las blancas Verdejo, Sauvignon Blanc, Viura y Chardonnay. Sus monovarietales de Verdejo y de Sauvignon Blanc son los más destacados de su gama de vinos, con múltiples premios a su excelencia nacionales e internacionales.
Castelo de Medina Fermentado en Barrica 2020, la nueva añada de un vino que solo sale al mercado cuando alcanza una calidad extraordinaria –las anteriores fueron las 2014, 2018 y 2019– está elaborado 100 % con la variedad de uva Verdejo, de la que revela todo el carácter. Procede de las mejores parcelas de Castelo de Medina, de suelos en su mayoría franco-arcillo-arenosos. Predominan los elementos gruesos, que proporcionan frescura durante la noche y, durante el día, irradian calor hacia los racimos. Concretamente, el viñedo del que procede este vino tiene un rendimiento medio de 5.000 kilos de uva por hectárea. Su fermentación se desarrolla en barricas de roble francés de 225 litros para, posteriormente, realizar un trabajo de battonage en esas mismas barricas durante seis meses, aproximadamente.
Untuosidad y recorrido en boca
Castelo de Medina Fermentado en Barrica 2020 es un blanco que plasma todo el carácter de la Verdejo pero con mucho más cuerpo, estructura, untuosidad y recorrido en boca. Presenta una tonalidad amarilla, con reflejos dorados y verdosos. En nariz, revela aromas a vainilla, madera nueva, hierba recién cortada, heno, hinojo y anisados. En boca es graso, con cuerpo, equilibrado y con un largo postgusto que redondea la gran estructura de este vino.
Se trata, por tanto, de un vino distinto a los blancos jóvenes de la D.O., para disfrutar despacio en ocasiones especiales o para acompañar toda una comida dejando que se abra, evolucione y muestre toda su riqueza de matices. Es ideal para acompañar quesos curados, ahumados, pescados azules y aves de corral. Ofrece un enorme potencial de guarda, como ya demostraron las anteriores añadas de esta etiqueta que continúa dando grandes alegrías a todo aquel que conserva alguna botella y tiene la oportunidad de disfrutarla.
Edición limitada
Castelo de Medina Fermentado en Barrica 2020 es una edición limitada de 4.000 botellas de estilo borgoñés que llevan el distintivo Tierra de Sabor, el sello de calidad de los productos agroalimentarios de Castilla y León. La añada anterior, la 2019, consiguió numerosos premios, entre ellos la Medalla de Oro y el premio al Mejor Vino de España en el Concurso Internacional de Lyon 2021 (Francia) y la Medalla de Oro en el Asia Wine Trophy 2020 (Corea del Sur).
La gama prémium de Castelo de Medina se completa con sus vinos Verdejo joven y Vendimia Seleccionada, que también presentan una etiqueta rediseñada en línea con la renovada imagen de la marca y su nuevo posicionamiento. Al frente de la misma se encuentra desde 2019 el joven Eudaldo Bonet, director general, con un bagaje que une su formación en Económicas, su especialización en enología y su experiencia en bodegas de propiedad familiar –los Bonet-Ferrer, fundadores y hoy accionistas de la casa Freixenet– y los pone al servicio de Castelo de Medina, una marca de referencia en la D.O Rueda, con proyección y reconocimiento internacional.
Sobre Bodegas Castelo de Medina
Construida en 1996, Bodegas Castelo de Medina está situada en la localidad vallisoletana de Villaverde de Medina, en el corazón de la Denominación de Origen Rueda, en un edificio de arquitectura tradicional castellana (ladrillo caravista, piedra, forja y madera) que ha sido dotado con la más avanzada tecnología para la elaboración del vino de calidad. Su filosofía productiva se basa en una continua inversión en I+D aunque «manteniendo por encima de todo los principios tradicionales de elaboración de la zona».
La bodega cuenta con una extensión de 180 hectáreas de viñedo propio, de las cuales 170 están cultivadas con las variedades blancas Verdejo, Sauvignon Blanc, Viura y Chardonnay, mientras que las otras 10 hectáreas son de Tempranillo, Garnacha y Syrah. En Castelo de Medina cultivan la vid, vendimian, seleccionan, elaboran, embotellan y comercializan, ofreciendo año tras año una garantía de calidad óptima en sus vinos blancos, rosados y tintos, que han sido premiados en los principales certámenes internacionales.