En el mundo de la repostería existen diferentes preparaciones que aun cuando pueden tratarse de clásicas o consideradas sencillas, no siempre son tan fáciles de hacer como quisiéramos. Tal es el caso del merengue, un básico que permite disfrutar de ricos pasteles decorados, hacer merenguitos horneados o decorar hermosas galletas o cupcakes.
Cuando se domina la técnica para montar bien el merengue, cualquier postre que prepares puede cambiar sustancialmente su apariencia y sabor en un par de minutos; por esta razón, te voy a contar lo que necesitas saber para que te quede perfecto.
9Emplea estabilizantes para un merengue perfecto y cuida la velocidad
Para que el merengue quede perfectamente montado y sobre todo, no se baje, ayúdate con un estabilizante. Algunas opciones son unas gotas de limón o apenas un poco de cremor tártaro. El cremor tártaro es el más recomendado, ya que no alterará el sabor del merengue y lo dejará más consistente, sin riesgo de caerse.
Cuando comiences a batir las claras, nunca lo hagas a velocidad alta o de forma brusca. Comienza a velocidad baja y cuando observes que comienza a tomar volumen, sube poco a poco la velocidad. Si comienzas a velocidad alta el resultado será contraproducente, ya que las claras no se van a airear de la manera correcta.