El consejero de Educación y Deporte de la Junta de Andalucía, Javier Imbroda, ha afirmado que la actividad cinegética «forma parte de nuestra cultura y está perfectamente reglada en los currículos educativos», por lo que pide «no confundir a la gente», mientras que desde Unidas Podemos por Andalucía han exigido no usar la educación «como moneda de cambio» y «no experimentar» con el currículo.
Así, y en respuesta a una pregunta formulada por la diputada Ana Naranjo, Imbroda ha señalado que los contenidos curriculares incluyen aspectos relacionados con la actividad cinegética y que en el ámbito puramente educativo, desde la Dirección General de Ordenación y Evaluación Educativa «se han mantenido varias reuniones con varios colectivos para la ampliación y profundización de actividades complementarias en los centros», aunque «todas estas cuestiones se han visto mermadas» por la pandemia y ha insistido que los contenidos «están dentro del currículo educativo y seguimos en esta dirección».
Ante estas afirmaciones, la diputada de Unidas Podemos por Andalucía Ana Naranjo se pregunta «con quién dialoga» el consejero, cuando en este caso en concreto «ha habido miles de manifestaciones en contra de ese acuerdo, porque lo que explica que vuelvan a poner el foco en torno a la caza y la tauromaquia dentro del currículo andaluz es el acuerdo que hicieron con la ultraderecha para aprobar los presupuestos de 2020», al tiempo que ha recordado declaraciones, por ejemplo, de Codapa en las que «se muestra en contra de destinar fondos a este tipo de formación».
Además, ha asegurado que docentes y Ampas «le han rebatido que es incompatible esta iniciativa con proyectos como escuelas espacios de paz, donde se fomentan valores positivos que no se identifican con la actividad cinegética, que tratan de inculcar el respeto a los animales y a la flora, porque así está en el currículo», al tiempo que ha añadido que Asadipre «criticaba también la falta de consenso» a la hora de abordar esta cuestión y que «hay que sacar la ideología y el partidismo de las escuelas».
«Ya está bien de intentar introducir valores que no deben de estar dentro del currículo como el pin parental o las revisiones de las instrucciones de los libros de texto», ha manifestado Naranjo, quien ha afirmado contundente que la educación «no puede ser moneda de cambio» y ha instado a «no experimentar con el currículo educativo, que bastante maltratado ha estado ya el sistema por las modificaciones e intentar introducir nociones partidistas e ideologías dentro de lo que estudian los andaluces».
«Por qué les gusta tanto prohibir y confrontar», ha espetado Imbroda a Naranjo, al tiempo que ha criticado que «les encante prohibir y marcar la pauta, con un ministro en el Gobierno que hasta nos quiere hacer el menú». Además, se ha hecho eco de las palabras de una concejala de IU en Estepa que afirmaba, según el consejero, que «es disparatado pedir la prohibición de una práctica que es una forma de relación con la naturaleza» o de las del alcalde de El Cuervo, que «no quería que se retirase esta actividad y decía que hay que buscar el encuentro».
«Quiero que compruebe la contradicción que transmite aquí con lo que transmiten sus compañeros», ha manifestado el consejero, quien ha añadido que uno de los grupos que apoyó la Ley de biodiversidad en el Congreso «fue su grupo». Se meten en este berenjenal y despistan», afirma, y agrega que la actividad cinegética «forma parte de nuestra cultura y está perfectamente reglada en los currículos y no hay que retorcer más esa norma y confundir a la gente.