Volvo Cars registró un beneficio neto de 11.900 millones de coronas (1.166 millones de euros al cambio actual) en los nueve primeros meses del año actual, lo que supone multiplicar casi por seis (+455%) los datos del mismo período del año pasado, según las cuentas trimestrales de la empresa publicadas este martes.
La firma automovilística destacó que este fuerte incremento de su resultado hasta septiembre se produjo a pesar de un entorno marcado por la pandemia de coronavirus y por los cortes de suministro de semiconductores a los que se está enfrentando la industria del automóvil.
La compañía escandinava, en lo que va de año, experimentó incrementos en la facturación y en las ventas, al tiempo que acumula un gran volumen de pedidos de automóviles. A pesar de ello, la marca fabricó unos 50.000 vehículos menos en todo el mundo en comparación con los tres primeros trimestres de 2020.
La cifra de negocio de la multinacional automovilística alcanzó 202.000 millones de coronas (19.803 millones de euros) entre enero y septiembre de este ejercicio, una subida del 14% en la comparativa con el mismo período del año pasado.
Volvo Cars comercializó 530.600 vehículos en todo el mundo en lo que va de ejercicio, un 18% de crecimiento interanual, al tiempo que su beneficio operativo fue de 16.600 millones de coronas (1.627 millones de euros), un 363% de progresión.
En el tercer trimestre, la empresa automovilística se anotó un beneficio neto de 2.300 millones de coronas (225 millones de euros), un 31% de bajada, a causa del impacto de la crisis de los semiconductores. La facturación en el período bajó un 7%, hasta 60.800 millones de coronas (5.960 millones de euros).
Entre julio y septiembre, las entregas mundiales de la compañía registraron una disminución interanual del 17%, hasta 149.900 unidades, con un beneficio operativo de 3.300 millones de coronas (323 millones de euros), un 27% menos.
El consejero delegado de Volvo Cars, Hakan Samuelsson, afirmó que la firma automovilística tiene el objetivo de ser el actor de más rápida transformación de la industria, hasta convertirse en un fabricante de automóviles totalemente eléctrico para 2030 y en una empresa neutral para el clima en 2040.