Con los vientos fríos que comienzan a soplar en otoño, ya los menús de gazpachos y sopas frías comienzan a ocupar su lugar en el cajón de la cocina y las recetas de sopas calientitas, gustosas y especiadas comienzan a ponerse sobre la mesa junto a los más divinos cocidos. La sopa de huevo es una de esas recetas que comienzan a prepararse con frecuencia cuando el frío aprieta y es capaz de calentar hasta el alma en los días de mucho frío.
Si hay algo que es emblemático de la sopa de huevo, es su sencillez y con esta receta que hoy te traigo, será tu favorita para los próximos días.
10Sirve y disfruta esta tradicional sopa
Cuando los huevos se cocinan, notarás como la sopa comienza a lucir cada vez más espesa y se nota blanquecina gracias a las claras y los hilos que se van formando dentro del caldo.
Con los ingredientes que te he señalado salen cuatro buenos tazones; sírvelos y espolvorea un poco de cebolla en rama en su superficie. Disfrútala bien caliente.