Cantabria asumirá en 2022 la dirección de Picos de Europa

Cantabria asumirá en 2022 la dirección de turno del Parque Nacional de los Picos de Europa con el reto de seguir avanzando en el modelo de cogestión que mantiene con Asturias y Castilla y León como «ejemplo de coordinación entre tres administraciones públicas que trabajan en objetivos comunes» y con el reto principal de aprobar el Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG) de este espacio, después de una tramitación «larga y que no siempre ha sido fácil».

El Parque avanza en el proceso y tras lograr los preceptivos informes de los distintos comités dependientes del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico inicia ahora el procedimiento administrativo en las comunidades autónomas que comparten el territorio. La previsión es que el documento, que ya ha sido informado por el Patronato, se someta a informe del Consejo de la Red de Parques Nacionales antes de fin de año y se promulgue el próximo. Se deberá aprobar mediante decreto de cada una de las tres comunidades que aportan terreno.

El consejero de Desarrollo Rural de Cantabria, Guillermo Blanco, ha participado este martes en la reunión del Patronato y de la Comisión del Parque junto a sus homólogos de Asturias y Castilla y León, Alejandro Calvo y Juan Carlos Suárez-Quiñones, respectivamente. Celebrada en Oviedo, ha contado con la asistencia de los directores generales de las tres autonomías con competencias en materia de medio ambiente y gestión de parques naturales.

En el encuentro se ha informado de los avances en la tramitación del PRUG, órgano en el que están representadas 43 entidades que abarcan todos los intereses vinculados al espacio protegido.

Además, se ha abordado el próximo presupuesto del Parque, que aún se está «debatiendo y acabando de cerrar», pero gracias a la llegada de los fondos de recuperación y resiliencia se superará la «cifra histórica» de 10 millones de euros para el Parque, lo que permitirá avanzar en los próximos dos años «de manera decisiva».

El consejero cántabro, que se pondrá al frente del patronato a partir del 1 de enero, cogiendo el testigo de Calvo, se ha mostrado satisfecho con la llegada de ayudas europeas que, a su juicio, deben servir para reflexionar sobre la importancia que tiene mantener un parque nacional pero también a los seres humanos que viven dentro de él, «especialmente los ganaderos». Un principio que ha confiado que tendrán «muy en cuenta» los proyectos que se pongan en marcha con el próximo presupuesto.

Al hilo, los titulares de Medio Rural de las tres comunidades han abordado la problemática causada tras la decisión del Ministerio para la Transición Ecológica de incluir el lobo en el Listado de Especies Silvestres de Especial Protección (LESPRE).

Han destacado que siguen demandando que se recupere el consenso gestión «que nunca se debería haber perdido» y que existía cuando estaban en vigor sus planes de gestión, lo que permitía la «convivencia» entre ganaderos y cánidos.

El consejero asturiano ha señalado que además de haber acudido a los tribunales se está trabajando en explicar la posición de las comunidades loberas para que el Ministerio entienda que con esos planes de gestión la especie «no ha retrocedido, sino todo lo contrario», y que su estado de conservación es «favorable». De no ser así, «seguiremos oponiéndonos con toda la contundencia en el ámbito administrativo y jurídico», ha sentenciado.

Por su parte, Suárez-Quiñones ha añadido que la orden ministerial de protección del lobo va en contra de la Estrategia Nacional de Conservación y Gestión aprobada en 2004.

En el caso del territorio cántabro se ha detectado la presencia de siete manadas seguras y dos más, una de ellas en Camaleño, sin confirmar, además de las manadas colindantes con el territorio del espacio protegido en las tres Comunidades Autónomas.

PLAN DE ACTUACIONES EN PICOS

Y con respecto a Picos de Europa, ha destacado la «sintonía absoluta» de las tres comunidades en su gestión, que «no entiende de fronteras» y trabaja por actuar en el parque como «una sola entidad».

La reunión ha servido para aprobar el plan de actuaciones del Parque para 2022, con un presupuesto ordinario previsto para Cantabria de 570.000 euros para realizar inversiones en infraestructuras ganaderas, el mantenimiento de viales y los desbroces de matorral para la prevención de incendios.

De igual manera, se ha dado el visto bueno a la memoria de actuaciones del último ejercicio y se ha informado, entre otras cuestiones, de las órdenes de ayudas destinadas a las entidades locales (300.000 euros) y empresas (100.000 euros) para la realización de actuación encaminadas a la conservación y mantenimiento del Parque y sus ecosistemas en su vertiente cántabra.

También se ha informado del proceso de participación puesto en marcha en el espacio protegido para adoptar medidas de usos y acciones de conservación, tales como acciones concretas en infraestructuras ganaderas o de uso público, propuestas de actividades tradicionales permitidas en el nuevo texto del PRUG o soluciones de movilidad que tengan en cuenta a la población local.

Además, se ha dado cuenta de la gestión del programa de reintroducción del quebrantahuesos en el Parque; del programa de control de ungulados, que propone en que en la vertiente cántabra se permita el abatimiento de entre 70 y 90 ejemplares de jabalí, y el seguimiento de las poblaciones de lobo en el Parque Nacional.

RETOS PARA 2022

En cuanto a los retos de 2022, Blanco ha informado de que la vertiente cántabra del Parque contará el año que viene con una inversión procedente de los fondos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia que asciende a un total de 3.525.181 euros, de los cuales 1.924.000 euros se destinarán a inversiones directas gestionadas por la codirección del Parque; 1.385.000 euros, a subvenciones para que las entidades locales realicen actuaciones en el área de influencia socioeconómica, y 216.181 euros, para subvenciones en concurrencia competitiva destinadas a empresas de ecoturismo y agroalimentarias de Camaleño, Cillórigo de Liébana y Tresviso.

Una inversión extraordinaria que se complementará con la ayuda ordinaria que de manera anual dedica el Gobierno de Cantabria al Parque y que el año que viene alcanzará los 783.677 euros, de los cuales 200.000 euros son aportados por el Consorcio del Parque; 283.677 euros, de inversión directa, y 300.000 euros, destinados a subvenciones para la realización de actuaciones en Camaleño, Cillórigo de Liébana y Tresviso, como municipios que integran el área de influencia socioeconómica del Parque en su vertiente cántabra.