El menú gastronómico italiano está lleno de recetas envueltas en una gran tradición y por lo general estas están inmersas en el máximo respeto a sus ingredientes sabores y formas de preparación. En el caso de los platos salados son muchos los platos que se adhieren a sus normas; entre ellos el risotto a la carbonara luce como uno de los más emblemáticos, mientras que la panna cotta es la representación máxima de sus postres.
Si quieres hacer una panna cotta con máximo sabor a tradición, quédate a conocer todos los detalles para lograrlo.
8Añade la gelatina y prepárala para cuajar
Una vez que la retires del fuego, escurre bien la gelatina que tenías hidratando y ponla dentro de la olla. Remueve muy bien hasta que la gelatina esté completamente disuelta. Si colocaste la vaina de vainilla o la rama de canela para aromatizar la nata, retíralas antes de poner la gelatina hidratada.
Tradicionalmente este postre se sirve en vasitos individuales. Por esta razón, vierte porciones en vasitos individuales. Apenas estén a temperatura ambiente llévalos a la nevera y déjalos allí por al menos 5 horas para que se cuajen perfectamente.