El menú gastronómico italiano está lleno de recetas envueltas en una gran tradición y por lo general estas están inmersas en el máximo respeto a sus ingredientes sabores y formas de preparación. En el caso de los platos salados son muchos los platos que se adhieren a sus normas; entre ellos el risotto a la carbonara luce como uno de los más emblemáticos, mientras que la panna cotta es la representación máxima de sus postres.
Si quieres hacer una panna cotta con máximo sabor a tradición, quédate a conocer todos los detalles para lograrlo.
4Comienza con la gelatina
Al utilizar láminas de gelatina sin sabor o en polvo, lo primero que debes hacer es hidratarla. Ponla en un envase y cúbrela con agua fría hasta que esté cubierta por completo.
Otra forma de ayudar a cuajar la panna cotta, es usar agar agar en lugar de gelatina; no obstante, la forma tradicional de toda la vida lleva gelatina sin sabor; así que para adaptar bien todo a la forma italiana, te recomiendo usar esta.