El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha anunciado que el gobierno valenciano pedirá autorización al Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) para implantar el conocido como ‘pasaporte covid’ en los establecimientos de hostelería y ocio con aforos de más de 50 personas, como también en las visitas a residencias de mayores y hospitales.
Así lo ha explicado Ximo Puig tras la reunión que ha mantenido este jueves la Mesa Interdepartamental para la Prevención y Actuación ante la covid-19, ante el aumento de contagios en la Comunitat Valenciana, que este miércoles alcanzó una incidencia acumulada de 150 casos por cada 100.000 habitantes.
Una vez autorizada la medida, entrará en vigor al día siguiente de su publicación en el Diari Oficial de la Generalitat Vaenciana (DOGV) por un plazo de 30 días. La «idea» es que esté vigente alrededor del día 3 de diciembre y durante las fiestas de fin de año, hasta el final de las celebraciones.
El ‘president’ ha detallado que el Consell pedirá al TSJCV que se implante el pasaporte covid en espacios de hostelería, restauración y ocio con aforos superiores a 50 personas y en espacios dedicados a actividades recreativas y azar con servicio de restauración. Puig ha aclarado que los cines y teatros no tendrán que exigir el certificado, al dejarse una butaca en medio de cada grupo y no considerarse un espacio en el que la población esté durante un tiempo prolongado sin mascarilla.
También se pedirá el aval judicial para exigir el pasaporte covid a las personas que visiten a pacientes ingresados en hospitales y residencias públicas y privadas.
De autorizarse, se exigirá también para celebraciones, eventos y festivaes de música en espacios interiores o al aire libre cuando no sea factible utilizar la mascarilla en todo momento. La obligatoriedad incluirá también bodas, comuniones y similares.
Para acceder a todos estos espacios, las personas deberán acreditar que cuentan con la pauta de vacunación completa, una PCR negativa en las últimas 72 horas o un test de antígenos negativo en las últimas 48 horas, así como un diagnóstico de superación de la pandemia en los últimos seis meses.
Los locales, en su entrada, tendrán un cartel sobre la necesidad de acreditar el pasaporte covid, que podrá presentarse en papel o en el móvil junto a un documento identificativo. En ese sentido, Puig ha detallado que ya se ha desarrollado una app que cualquiera podrá descargar y ha explicado que esta semana se mantendrán reuniones con el sector para «dotarlo de las máximas facilidades». También ha precisado que no se conservarán datos ni se elaborarán ficheros con esta información para proteger los datos de las personas.
Se solicita la colaboración de los cuerpos y fuerzas de seguridad y para ello el próximo viernes se convocará la junta de seguridad. El incumplimiento de la medida estará sujeto al régimen sancionador específico de las medidas contra el coronavirus. Este viernes se aprobará el decreto ley correspondiente para concretar las sanciones.
La decisión del Consell, según ha destacado Ximo Puig, persigue dos objetivos: «Generar espacios más seguros y libres de persoans no vacunadas» y «convencer a esas personas para que den el paso responsable y sentado que ya han dado nueve de cada diez valencianos». «Es un ejercicio de ciudadanía», ha subrayado el ‘president’.
El anuncio se produce después de las reuniones que ha mantenido la Conselleria de Sanidad Universal con representantes de los sectores afectados durante los últimos días. Este miércoles, las principales asociaciones empresariales mostraron su respaldo a impulsar el pasaporte covid, en lugar de restricciones como limitaciones de aforos y horarios.
«NO EXISTE EL DERECHO A CONTAGIAR»
El presidente de la Generalitat ha insistido en que la vacuna es «muy efectiva» y «una persona no vacunada tiene 20 veces más riesgo de entrar en la UCI», pero aunque «protege mucho la salud», «no corta la transmisión del virus» y «es mucho más fácil que sean los no vacunados los que propagan la enfermedad». Por ello, ha esgrimido que «la libertad tiene unos límites» y «no existe el derecho a contagiar a los demás y a saturar los hospitales».
Ximo Puig ha defendido que el escenario sanitario actual «constata» la «evidencia» de que «estamos más protegidos que nunca pero no ha acabado la pandemia». En ese sentido, ha indicado en que las fiestas navideñas son fechas «sensibles» en las que se producen «condiciones más favorables para la transmisión del virus», con el frío y las reuniones familiares en las que se generan «ámbitos de confianzas» en los que «muchas veces» se relaja el uso de mascarilla y se mantienen más contactos. Por ello, ha subrayado la necesidad de «reforzar la protección de todos los ciudadanos».
Bajo este marco, ha remarcado los «buenos resultados» de la vacunación y la prudencia» en una comunidad que llegó a tener 48.800 personas hospitalizadas, una cifra que es «13 veces inferior» en la actualidad, «once veces menor» en el caso de las UCI. En ese sentido, ha señalado que la situación «no es comparable» pero se debe «romper la tendencia creciente» actual de contagios y «reaccionar» para evitar una coyuntura peor.
Preguntado por si hay un «plan B» si el TSJCV no avala el pasaporte covid, Ximo Puig ha señalado que el Consell «confía» en que se apruebe la medida porque «es proporcional, necesaria y de urgencia para prteger la salud de la población y garantizar el derecho a la vida». Ha recordado que con anterioridad ya «ha avalado las posiciones argumentadas» que ha ido acordando la Generalitat. «Si se produjera un auto contrario, evaluaríamos la situación», ha indicado, antes de añadir que la solicitud que remitirá el Consell dispone de «suficiente argumentación para que se estime» su posición.
«LA VOLUNTAD ES QUE NO HAYA MÁS RESTRICCIONES»
El ‘president’ ha señalado que «la voluntad es que no haya más restricciones» durante las navidades, pero que si la situación empeorara se reuniría de nuevo la interdepartamental y se escucharían las recomendaciones de las autoridades sanitarios. «Las circunstancias son las que mandan siempre», ha indicado. También ha puntualizado que no se plantea de momento ampliar la implantación del certificado a otros sectores.
Asimismo, Ximo Puig ha apelado a la «responsabilidad» en los locales con aforos inferiores a 50 personas, exentos de la norma por la dificultad que supone su cumplimiento cuando se trata de autónomos o tienen poco personal. En ese sentido, Puig ha remarcado que se debe llevar mascarilla cuando no se esté consumiendo y que «todos los propietarios de locales con menos de 50 personas tienen que tener mayor exigencia en esta cuestión». «No queremos que sean policías porque no lo son, pero las personas que entran deben ser conscientes y asumir su responsabilidad», ha defendido.