El fútbol mundial quedó conmocionado cuando este verano se concretó un hecho que jamás se pensó que pasaría: la salida de Lionel Messi del FC Barcelona. Para todos los mortales estaba asumido que el crack argentino se retiraría en el conjunto blaugrana o, en tal caso, se iría a la MLS a explotar unos dos últimos años de fútbol; de esta forma se retiraría haciendo lo que más le gusta y de titular, pues con la edad asumiría que el en el Barça no podría. Sin embargo, todo ese panorama ha ido variando y desde la temporada pasada la posibilidad de que el rosarino saliera del equipo catalán se volvió muy real.
Tras todo el lío con el burofax, la falta a su palabra de Josep Maria Bartomeu y las ansias por salir de Messi, las cosas se fueron calmando y poco se iban dando los parámetros necesarios para que el argentino se quedara. Con la renuncia de Bartomeu y luego la elección de Joan Laporta como nuevo mandatario culé ya se pensó que estaba hecho; pero en los cálculos no entró algo elemental: lo que costaba tener al jugador en el equipo. Hacerle un nuevo contrato fue imposible y a pesar de que parecía que todo estaba listo para que firmara como blaugrana una vez más y se anunciara su vinculación por todo alto, al final lo que se hizo fue una rueda de prensa, que se quedó muy pequeña, para despedirlo. Meses después, Laporta está diciendo que podría volver y eso está muy alejado de la realidad.
1Messi va mejorando en París
Pese a todos los rumores y a las críticas que ha generado el desempeño de Messi desde su llegada al PSG, en el que todavía está en proceso de adaptarse; las cosas van mejorando poco a poco, así que no se entiende que se diga que ni el ni su familia están bien en París y que podrían regresar a Barcelona, cuando esto no es verdad.