El uso de lentillas no está exento de riesgos. Después de todo, se sientan justo en el ojo. Sin embargo, si cumples con las reglas básicas de higiene y acudes al oftalmólogo para controles regulares, la probabilidad de quejas graves es baja.
9Una higiene cuidadosa reduce el riesgo de lentes de contacto
Muchas infecciones oculares en usuarios de lentes de contacto se pueden prevenir. Son provocadas por gérmenes, bacterias u hongos que podrían asentarse en las lentillas debido a una manipulación incorrecta.
Por tanto, la máxima prioridad con las lentillas es la limpieza. Antes de tocar las lentillas, lávese bien las manos y séquelas con una toalla limpia. Además, ni las lentillas ni el estuche de las lentes de contacto deben limpiarse con agua del grifo.
El agua del grifo puede contener acanthamoeba, que causa la dolorosa y peligrosa queratitis por acanthamoeba.