Un caldo casero de pollo es una de las recetas más sencillas de hacer, pero también una de las más resultonas. Con tan solo media pechuga de pollo puedes lograr un sabor concentrado y disfrutar de todo su calorcito en estos días de brisa fría. Además de sabroso, este tipo de caldo es muy reconfortante, así que te invito a conocer cómo lo puedes hacer bien sabroso y sin tantos ingredientes.
6Comienza con los huesos de pollo y la media pechuga
Lo primero que debes hacer es verter un poco de aceite de oliva en una olla que tenga capacidad para hacer el caldo.
Tal como lo has visto en la lista de ingredientes, serían 2.5 litros de agua más las verduras, pechuga y huesos, por lo tanto, el tamaño de la olla es importante. Una vez que el aceite esté caliente, añade los huesos y rehógalos un poco. Incorpora la pechuga y séllala solo un poco.