El momento de decir adiós nunca es fácil y más de algo que llevas haciendo desde niño; esto es precisamente lo que le sucede a Joaquín Sánchez, que con 40 años ya ve el retiro cada vez más cerca y se especula que eso sucederá justo al finalizar esta temporada. Desde hace algunas campañas se viene especulando con esa retirada de las canchas, pero el andaluz siempre respondía en el campo siendo un hombre clave con el Betis; sin embargo, ya esta temporada las cosas han cambiado tanto que ya casi ni juega en Liga y solo en la Europa League ha sido titular. Con ese panorama, ya no son solo voces que se levantan por aquí y o por allá, es el mismo futbolista el que ya menciona esa posibilidad.
Claro que Joaquín Sánchez nunca rehuyó de la posibilidad de hablar del retiro, pues por edad ya era algo que se especulaba; la cuestión es que su respuesta siempre dejaba a la puerta abierta a seguir en la lucha, ahora eso ha sido muy distinto. Durante el programa ‘El Hormiguero’, de ‘Antena 3’, el andaluz ya habló más claro y mencionó: «Buscar el momento adecuado para retirarse en una profesión que es lo que has vivido desde pequeñito es muy complicado. Pero con 40 años no es que vea el momento, es que ya no juego, aquí ya sobro». Con su futuro más ligado a la televisión, ya Joaquín va dejando claro que es lo que hará; pero no se puede olvidar el legado de un jugador legendario e irrepetible, que dejará un huella imborrable tanto dentro como fuera del campo con sus logros y locuras.
7Dos participaciones en Mundiales y una Eurocopa figuran en su cuenta
Al ser un jugador de gran calidad era obvio que Joaquín Sánchez jugaría para la selección de España. Con «La Roja» jugaría en 51 oportunidades, anotando cuatro tantos y en total estaría en dos Mundiales, Corea-Japón 2002 y Alemania 2006, y una Eurocopa, Portugal 2004. El andaluz es muy recordado al ser protagonista en aquel escandaloso partido de cuartos de final ante Corea del Sur, con un arbitraje nefasto de Al-Ghandour, que anuló un gol legal de Morientes al señalar que la pelota había salido al momento en que la centró Joaquín; y luego fue él quien falló el cuarto penal de los españoles en la tanda decisiva y acabó devastado.