El momento de decir adiós nunca es fácil y más de algo que llevas haciendo desde niño; esto es precisamente lo que le sucede a Joaquín Sánchez, que con 40 años ya ve el retiro cada vez más cerca y se especula que eso sucederá justo al finalizar esta temporada. Desde hace algunas campañas se viene especulando con esa retirada de las canchas, pero el andaluz siempre respondía en el campo siendo un hombre clave con el Betis; sin embargo, ya esta temporada las cosas han cambiado tanto que ya casi ni juega en Liga y solo en la Europa League ha sido titular. Con ese panorama, ya no son solo voces que se levantan por aquí y o por allá, es el mismo futbolista el que ya menciona esa posibilidad.
Claro que Joaquín Sánchez nunca rehuyó de la posibilidad de hablar del retiro, pues por edad ya era algo que se especulaba; la cuestión es que su respuesta siempre dejaba a la puerta abierta a seguir en la lucha, ahora eso ha sido muy distinto. Durante el programa ‘El Hormiguero’, de ‘Antena 3’, el andaluz ya habló más claro y mencionó: «Buscar el momento adecuado para retirarse en una profesión que es lo que has vivido desde pequeñito es muy complicado. Pero con 40 años no es que vea el momento, es que ya no juego, aquí ya sobro». Con su futuro más ligado a la televisión, ya Joaquín va dejando claro que es lo que hará; pero no se puede olvidar el legado de un jugador legendario e irrepetible, que dejará un huella imborrable tanto dentro como fuera del campo con sus logros y locuras.
6Una boda con la Copa como protagonista
Si de momentos especiales se trata Joaquín Sánchez tiene muchos y muy especiales, pero si hay uno que supera los demás es su boda en la que además de él y su esposa, Susana Saborido, la otra gran protagonista fue la Copa del Rey que ganó esa misma campaña con el Betis. A Manuel Ruiz de Lopera, presidente del conjunto verdiblanco en el aquel momento, no se le ocurrió nada mejor que llevar el trofeo a la boda de su jugador estrella y en cada una de las fotos de la ceremonia, allí aparece la Copa; porque hasta en el altar la pusieron mientras se celebraba la boda. Una de las grandes anécdotas de un jugador extraordinario.