El consejero delegado de Telefónica, Ángel Vilá, se ha pronunciado a favor de la consolidación del mercado español este jueves en la conferencia de Tecnología, Medios y Telecomunicaciones (TMT) de Morgan Stanley.
«La consolidación debería ocurrir para resolver una situación insostenible para algunos operadores», ha señalado el directivo en su intervención en el foro.
Telefónica no puede actuar por su tamaño como agente que compre otro operador, pero lo hará como facilitador de la misma.
Esta semana, directivos de primera línea de Vodafone, Orange y MásMóvil han abogado públicamente por nuevos movimientos en el mercado que reduzcan la competencia y relajen la presión sobre los márgenes.
Para aliviar los de Telefónica, Vilá ha hecho alusión a una nueva ronda de eficiencias en costes, para lo que se empezará a negociar con los sindicatos el próximo 23 de noviembre con la posibilidad de un nuevo plan de salidas voluntarias en el aire.
Asimismo, el directivo ha reiterado la postura de Telefónica de buscar una rebaja en el precio de los derechos audiovisuales en España de LaLiga española.
Vilá ha señalado que la firma está analizando las distintas combinaciones de la subasta y que espera que la puja no sea «irracional» y que el resultado se conozca en el mismo diciembre.
Además, ha destacado el carácter de ‘plataforma de plataformas’ que está adquiriendo Movistar + con la integración de Amazon Prime, Netflix, Disney + y Dazn, así como la importancia del fútbol para el churn (fidelidad de los clientes) y ARPU (gasto por cliente).
DIVIDENDO E INFRAESTRUCTURA
El consejero delegado también ha asegurado que el consejo aún no ha decidido sobre el formato que tendrá el dividendo el año que viene.
Vilá ha subrayado que la incertidumbre del coronavirus fue lo que llevó a Telefónica a apostar por el dividendo flexible, cuya acogida por los accionistas ha celebrado.
Ahora que parte de esas incertidumbres han desaparecido, el grupo tomará una nueva decisión.
FIBRA Y CABLE
Vilá también ha abordado la estrategia de infraestructuras de la compañía y ha reiterado que Telefónica no contempla ceder el control de la fibra óptica en España, pero ha señalado que hay muestras de interés, lo que confiere «opcionalidad» al activo.
Asimismo, ha destacado que no se ha tomado una decisión sobre qué hacer con el cable submarino y ha abierto la puerta a no acometer finalmente una desinversión, incluso si hay minoritarios que desean salir.
