En España cada vez más personas se están uniendo a la admiración que genera el fútbol femenino. Sus partidos son cada vez más vistos y las futbolistas ya tienen un estatus muy importante. Todos los aspectos indican que las jugadoras son más que profesionales; sin embargo, ese es uno de los aspectos en los que difieren del balompié masculino. A estas alturas, a las chicas no se les considera profesionales y cada vez ese es un hecho que choca de frente contra los intereses de todas y que no se apega al discurso de igualdad que siempre se pregona.
Las conversaciones para convertir el fútbol femenino en algo más profesional se vienen dando desde hace tiempo; no obstante, tal parece que se están quedando solo en eso y esa es una situación que las jugadoras no quieren seguir aguantando. Hace poco se organizaron y en una rueda de prensa advirtieron de que si sus demandas de profesionalismo siguen ignorándose, la huelga es una posibilidad que se antoja cada vez más real.
7Sin lo mínimo para atender a las jugadoras
Por más surrealista que parezca, esta situación en el fútbol femenino es la prueba de que están lejos de ser profesionales, pues no tienen ni los mínimos requisitos para mantenerse bien. Sin los efectivos necesarios para atender las jugadoras, sin los implementos y en fin, sin las ganas, todos parecen pasar por alto olímpicamente el asunto de la profesionalización; algo que realmente está colmando la paciencia de las futbolistas.