Oreja: cómo la debes freír para que esté crujiente y sabrosa

-

La oreja es uno de los pinchos más tradicionales de un bar que se precie. Si lo ofrecen en un establecimiento es porque es un valor seguro, ya que si les saliera mal no se atreverían a ponerla. Este plato le saca jugo a unas de las partes con menos carne del cerdo, pero jugando con su textura queda riquísima.

Esta receta es típica por ser el pincho de los bares, pero también puedes hacerla en casa, ya que no tiene misterio alguno. Funciona muy bien como aperitivo aunque también puedes servirla como segundo plato. A continuación, te mostramos cómo debes freír la oreja para que esté crujiente sin perder su sabor.

6
EN SALSA ESTÁN MAS JUGOSAS

Una vez que el agua haya reducido un poco, échale la oreja junto a un puñado de perejil picado. Pon el fuego suave para evitar que se pegue o se queme. El tiempo para que se cocine no puede sobrepasar los 10 minutos, aunque tú tienes que controlar el guiso para que la salsa coja el punto que quieras: más espesa o más liquida.

La oreja, sea en salsa o frita, es un plato muy jugoso que va a hacer las delicias de todos tus comensales. Esta parte del cerdo tiene que cocinarse mucho para que no sea imposible de comer por su composición cartilaginosa. ¡Qué aproveche!

Siguiente