Cuando se quiere dar una textura crujiente a un empanado lo tradicional es usar harina y pan rallado; también el panko o la maicena suelen ser los protagonistas de las recetas que requieren de pasar por estos procesos para posteriormente freírse y disfrutarse. Seguramente en algún momento te ha pasado que te queda un trozo de pan y no sabes como aprovecharlo; y luego al preparar unas croquetas sales a la tienda a comprar pan rallado para rebozarlas.
Esto nos sucede a todos alguna vez y con más frecuencia de la que creemos. Lo cierto es que puedes aprovechar al máximo esos trozos de pan que te han sobrado y hacer en casa pan rallado para usarlo cuando quieras. Quédate y entérate de cómo puedes hacerlo sin complicaciones.
8¿Tienes un robot de cocina? Ahorra tiempo y tenlo listo rápidamente
Si bien, rallar el pan puede resultar algo lento, puedes apurar este paso si te ayudas con un robot de cocina o procesador de alimentos.
Usar este tipo de artefacto tiene sus ventajas. Para empezar te va a permitir disminuir los tiempos y además podrás dejar las migas del tamaño que prefieras. Puedes ajustar y dejar un pan más fino o con algunos tropezones que le den un toque único.