La brisa comienza a tornarse fría, las hojas comienzan a pintarse de colores tierra y la necesidad de consumir platos de cuchara llenos de sabor y que den calorcito al cuerpo se convierte en toda una búsqueda incesante de los más divinos platos tradicionales. La sopa de ajo castellana es una de esas recetas que alegran el espíritu en los meses de otoño e invierno y es un infaltable en todos los hogares.
Cuando hablamos de sopa de ajo castellana la sencillez y el gusto por la cocina divina y sencilla salta a la vista. Solo cuatro ingredientes son básicos para disfrutarla y de ahí en adelante tu imaginación puede añadir uno que otro que combine y que termine de dar el punto potente al plato. Vamos a adentrarnos en los cuatro que la conforman y en cuál es el más añadido aparte de estos. Te aseguro que conociéndolos bien, solo triunfarás al preparar este plato tradicional.
4Pimentón dulce: el rico placer que inunda de color y sabor los platos
El pimentón dulce se ha llegado a convertir en un infaltable de la cocina española y no es para menos, este ingrediente que llegó de tierras lejanas americanas, engalanó con su presencia las mejores preparaciones.
El pimentón dulce da sabor y color a la deliciosa sobrasada y por supuesto inunda con sus propiedades a la sopa castellana. Aunque se trata de un ingrediente que se puede llegar a considerar nuevo en el menú gastronómico de España, lo cierto es que no hay manera de escapar de este y añadirlo a las comidas durante esta temporada termina de dar el toque justo que tanta falta le hace al cuerpo.