El consumo de vino y de alcohol en general, a menudo es una convención social. Lo solemos asociar a los momentos de ocio y relajación, disfrutando de una copa con los amigos o de una copa de vino en la comida o la cena. Además, hay algunos estudios que se centran en los beneficios que puede causar el consumo de vino en pequeñas cantidades.
1El consumo de vino puede ser saludable en las comidas
Así, por ejemplo, hay estudios que demuestran que los adultos que consumen cantidades pequeñas o moderadas de alcohol tienen una menor predisposición a padecer enfermedades de tipo cardiaco. Pongamos como ejemplo aquellas personas que toman una copa de vino con la comida o la cena. Sin embargo, los expertos también nos alertan que no es conveniente que comencemos a consumir alcohol solo reducir algo el riesgo de padecer este tipo de enfermedades. Y es que la línea entre el consumo “saludable” de alcohol y el excesivo es muy fina, especialmente si pensamos que beber de más puede provocarnos problemas de hígado y también de corazón.