Cuando de postres se trata, las natillas encabezan la lista de los preferidos durante generaciones. Todos hemos crecido degustando este postre tradicional y sencillo preparado por las manos de nuestras abnegadas abuelas y madres. Este dulce cremoso y delicioso cierra cualquier comida con broche de oro, y también se presenta como la mejor merienda para los niños. Hacerla con chocolate blanco le otorga un sabor irresistible, pero su contenido calórico la convierte en un pecado que debes limitarte a cometer.
Te invito a conocer todo sobre esta versión calórica, pero deliciosa, que te puedes permitir al menos una vez al año.
2El chocolate blanco, un sabor irresistible para una delicada natilla
Seguramente has disfrutado en algún momento de una dulce barra de chocolate blanco. Su sabor y cremosidad seducen. Una de las preparaciones que se preparan con este protagonista es el más dulce coulant y quién no ha disfrutado de su rica cremosidad que se funde en el paladar al comer un buen turrón.
Lo cierto es que con este chocolate pueden hacerse los más variados postres y comerlo es todo un placer que despierta los sentidos. Por supuesto, su presencia en las natillas hará estás más divinas y delicadas, pero cuidado, este dulce, si bien es rico, es mejor disminuir su consumo y darte un placer solo de vez en cuando.