Las malas noticias se siguen expandiendo en el FC Barcelona como las plagas que le cayeron a Egipto cuando el Faraón no dejó salir al pueblo de Israel. Ya no es solo que están golpeados institucional y económicamente, sobre todo allí, sino que también y ya se puede decir sin temor alguno, en una crisis deportiva de las de época. La reciente derrota en el Clásico contra el Real Madrid y la nueva caída ante el Rayo Vallecano ya ha producido el despido de Ronald Koeman, como muchos querían; pero con esto se le acaban las excusas y escudo a Joan Laporta, pues toda la responsabilidad ya caerá en él.
El panorama ciertamente es muy gris y todos se encuentran apesadumbrados, debido a que nadie se explica que sucede en el Barcelona. Sin embargo, entre las pocas cosas buenas que dejó Koeman en su pasó por el club azulgrana fue esa apuesta final por los jóvenes, que le han abierto los ojos a muchos y han dado paso a ese cambio que tanto pedía a gritos el club. El presente es un desastre, pero futuro pinta mucho mejor y es por eso que el la institución catalana quieren protegerse las espaldas con algunas renovaciones para resguardar ese futuro.
4En el Barça saben que no será fácil
Aún tras haber logrado estas dos renovaciones, el club es consciente de la dificultad que supone conseguir convencer a los jugadores con la precaria situación deportiva y, mucho más importante ahora, económica en la que está el Barcelona. La enorme deuda que pesa en el la institución catalana y los múltiples problemas económicos que ya hombres como Laporta y Ferran Reverter han dado a conocer, colocan al equipo en una situación de desventaja a la hora de negociar renovaciones con sus futbolistas; más aún con los jóvenes y prometedores. La cosa es que debe ingeniárselas, pues de esos chicos es que depende el futuro del equipo.