El hornazo de Salamanca es una masa rellena de embutidos que mucho se asemeja a la empanada gallega. Una masa delicada envuelve de forma sutil los más ricos embutidos y su exterior con el tradicional enrejado decorativo termina de otorgarle la mejor de las presentaciones. Su consumo se popularizó en épocas de Semana Santa, más específicamente para el lunes posterior a ella, momento en el que se celebraba el fin de la abstinencia y se daba paso al placer en todas sus denominaciones, tanto carnales como gastronómicas.
Según la casa a la que vayas será el hornazo que degustes, pues en cada familia tienen su receta. Aun así, hay ciertas normas que debes cumplir para hacerlo lo más auténtico posible.
1El hornazo de Salamanca: solo haciéndolo de la forma tradicional
¿Sabías que desde el 2004 el hornazo cuenta con su propia marca de garantía? Así es, y bajo esta denominación de “Hornazo de Salamanca”, su preparación debe ajustarse a la receta tradicional y ser preparado con los mejores productos de Salamanca.
Si quieres saber los pormenores de su preparación y deseas hacerlo en casa con el más puro sabor a tradición, quédate a conocer todo lo que estoy por contarte.