La olla podrida es un plato típico de Burgos con un nombre desafortunado producto de la pronunciación diferente de su nombre original debido a la evolución del lenguaje. Su significado inicial era plato de poderosos ‘olla poderida’ y se trataba de una exquisitez que solo los de alto poder adquisitivo podían permitirse. Esta es solo una de las explicaciones para un nombre tan particular en un plato de tan alto valor nutricional y de sabor.
Lo cierto es que si algo es cierto, es que la olla podrida de Burgos es uno de los platos de cuchara más amado y socorrido en la época de invierno. Sus aportes nutricionales y energéticos te ofrecen aparte de un gran sabor, todo lo necesario para dar un empuje de fuerza y poder para enfrentar las jornadas.
8Cocina el relleno
Una vez que tienes los huevos batidos, es el momento de cocinarlos. Este paso es muy sencillo.
Para cocinar los huevos, simplemente prepara una especie de tortilla en una sartén con un poco de aceite de oliva virgen extra caliente. Prepara dos o tres tortillas y ve poniéndolas en un plato. Resérvalas.
