La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha eludido este sábado valorar los roces surgidos dentro del Gobierno de coalición a raíz de la reforma laboral y la decisión de dejar sin escaño al diputado Alberto Rodríguez, de Unidas Podemos, y ha cedido el protagonismo a Comisiones Obreras (CCOO), en la celebración de su 12º Congreso Confederal.
A su llegada al Congreso, Díaz ha respondido que «hoy es el día de Unai Sordo (secretario general del sindicato)», tras ser preguntada si se siente desautorizada por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
El jefe del Ejecutivo aseguró este viernes, en una rueda de prensa en Bruselas, que no existe una intromisión de la vicepresidenta primera del Gobierno, Nadia Calviño, en la negociación sobre la reforma laboral, pues es un asunto que compete a todo el Ejecutivo.
El respaldo de Sánchez a Calviño llegó después de que Unidas Podemos solicitara al PSOE, su socio de coalición, una reunión urgente tras criticar la intromisión de la titular de Economía en las competencias de Díaz.
En las últimas horas, la tensión entre los socios de Gobierno se ha incrementando con la decisión de la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, de dejar sin escaño al parlamentario Alberto Rodríguez. La actuación de Batet responde a una sentencia del Tribunal Supremo que condena a Rodríguez a la inhabilitación especial para el ejercicio del derecho de sufragio pasivo.
Al respecto, Unidas Podemos anunció que interpondrá una querella contra la presidenta del Congreso por un presunto delito de prevaricación tras la decisión «unilateral» de comunicar la retirada del escaño al diputado.
Díaz también ha sido interpelada por esta cuestión a su entrada al Congreso. «Hoy es el día de CCOO», ha zanjado la ministra.