El exministro y ex portavoz del PSOE en la Asamblea de Madrid Ángel Gabilondo (San Sebastián, 1949) será el próximo Defensor del Pueblo, tras el acuerdo alcanzado entre el PP y el PSOE. De este modo, el catedrático en Filosofía vuelve a la primera línea de la política, con un cargo institucional de prestigio, tras su dimisión el pasado mes de mayo por el batacazo del PSOE en las elecciones autonómicas en Madrid.
El PSOE lleva proponiendo a Gabilondo para este puesto desde hace más de un año, después de que en 2019 ganara las elecciones autonómicas en Madrid pero no lograra hacerse con la Presidencia de la Comunidad.
Tras los comicios madrileños de mayo de este año, en los que el PSOE sacó el peor resultado de su historia, Gabilondo y el entonces líder del partido en Madrid, José Manuel Franco, fueron los únicos que asumieron con su cargo la responsabilidad de los malos resultados, y dimitieron. Gabilondo ni siquiera llegó a recoger su acta de diputado en la Asamblea de Madrid.
Ahora, cinco meses después, y con Gabilondo ya al margen de la política, los socialistas han decidido volver a ofrecerle el puesto de defensor del Pueblo, lo que de algún modo resarciría la salida que tuvo el exministro de la Política en mayo.
Cuando la presidenta madrileña anunció el pasado mes de marzo el adelanto electoral, el PSOE optó por mantener a Gabilondo como candidato, a pesar de que se llevaba meses hablando de él como próximo Defensor del Pueblo, y prácticamente se tenía asumida su marcha de la Asamblea en un futuro próximo.
No obstante, la inesperada convocatoria, dos años antes de lo previsto, y desencadenada por la fallida moción de censura de Murcia, pilló al PSOE desprevenido y sin otro candidato claro. Tampoco había visos de poder alcanzar pronto un acuerdo con el PP para renovar este órgano constitucional, tras frustrarse una vez más la negociación para el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), y meses de desencuentros.
Por ello, los socialistas decidieron apostar por el perfil «soso, serio y formal» de Gabilondo, en contraposición al estilo «trumpista» con el que definieron a la candidata del PP. Sin embargo, esa estrategia, diseñada directamente en Moncloa, no funcionó, y Díaz Ayuso se hizo con la victoria.
La dirección socialista decidió entonces no culpabilizar a los asesores del presidente Pedro Sánchez pero, dos meses después, el que fuera director de gabinete del presidente Pedro Sánchez, Ivan Redondo, sí fue uno de los ‘caídos’ en la intensa crisis de Gobierno que acometió el jefe del Ejecutivo a mediados de julio.
LLEGA A LA POLÍTICA EN 2009 DE LA MANO DE ZAPATERO
La carrera política de Gabilondo empezó en 2009, de la mano del ex presidente José Luis Rodríguez Zapatero, cuando decidió nombrar al entonces rector de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) nuevo ministro de Educación. El catedrático de Filosofía también era en ese momento presidente de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE).
Tras su paso por el Gobierno –que acabó en 2011 con la llegada del PP a Moncloa–, Gabilondo decidió seguir vinculado al PSOE y a la política y, en las autonómicas de 2015, se convirtió en el candidato a presidir la Comunidad de Madrid.
En aquella ocasión logró superar ligeramente los resultados de su predecesor, Tomás Gómez, pero quedó tras el PP, sin posibilidad de gobernar. No obstante, en 2019 decidió repetir como candidato y en esa cita sí se hizo con la victoria –que el PSOE no alcanzaba desde el 87–, aunque no logró los suficientes apoyos para gobernar.
Después de pasar otros dos años como líder de la oposición –muy cuestionado durante la pandemia–, se daba ya por hecho su salto a la Defensoría del Pueblo, si bien el adelanto electoral de Díaz Ayuso llegó antes que el acuerdo que, ahora sí, el PSOE y el PP han sellado para renovar esa institución, que lleva desde 2017 en funciones.
El candidatura de Gabilondo para defensor del Pueblo, que ahora ha aceptado el PP, fue criticada por Díaz Ayudo durante la campaña madrileña. Entonces aseguró que, si de ella dependía, el exministro no sería defensor del Pueblo. No obstante, dos meses después rectificó y aseguró que no sería un mal candidato para este puesto.
Antes de entrar en política en 2009, Gabilondo había desarrollado su carrera en la Universidad Autónoma, de la que se acabó convirtiendo en rector. Allí estudió Filosofía y Letras y, tras licenciarse en 1980, se doctoró en 1983, con una tesis sobre Hegel, titulada ‘El concepto como experiencia y sistema’, para lo que residió en Bremen y en Bochum. Después fue decano de la Facultad de Filosofía y Letras durante los años 1989-1992. En 2001 se convirtió en catedrático, y en 2002 fue elegido rector.