La conciliación de la medicación mejora la continuidad asistencial, evita los reingresos en los hospitales y es coste efectiva, según ha demostrado el estudio ‘Concilia Medicamentos 2’, liderado por el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos (CGCOF), que ha analizado discrepancias y errores de medicación tras el ingreso hospitalario de los pacientes.
La conciliación es el servicio profesional en el que el farmacéutico realiza una comparación sistemática y protocolizada de la lista de medicamentos utilizados por el paciente, antes y después de una transición entre niveles asistenciales. El objetivo es asegurar la necesidad, efectividad y seguridad del tratamiento farmacológico actual realizando las oportunas intervenciones, en coordinación con los profesionales sanitaries implicados.
La actuación principal de este servicio consiste en la identificación, por parte del farmacéutico comunitario de posibles discrepancias para su posterior analisis, evaluación y resolución, en su caso.
Este proyecto de investigación, impulsado por el CGCOF junto con las Universidades de Salamanca y San Jorge (Zaragoza), ha contado con la colaboración de Laboratorios Cinfa y la participación de 8 Colegios Oficiales de Farmacéuticos (Castellón, Guadalajara, Huelva, Las Palmas, León, Pontevedra, Santa Cruz de Tenerife y Valencia).
En el estudio, que se extendió entre abril de 2019 y febrero de 2020, han participado 145 farmacias y 10 hospitales, con un total de 204 farmacéuticos comunitarios, hospitalarios y/o de atención primaria y 622 pacientes.
Sus resultados, según han resaltado los responsables del estudio en rueda de prensa, evidencian que la intervención del farmacéutico a través del Servicio de Conciliación de la Medicación al alta hospitalaria es efectiva, con más de 860 intervenciones, un 80 por ciento aceptadas por el médico, que facilitaron en un 96,2 por ciento la continuidad asistencial a mayores de 65 años, pluripatológicos, polimedicados, y que habían permanecido ingresados durante unos 10 días.
De los 622 pacientes incluidos en el estudio, el 88,3 por ciento fueron conciliados en la Farmacia Comunitaria y el 31,5 por ciento en la Farmacia Hospitalaria, con seguimiento posterior en la Farmacia Comunitaria. Además, el 96,5 por ciento presentaron al menos una discrepancia en su tratamiento al alta hospitalaria, con una media de 4,2 por paciente.
Además, este estudio ha demostrado que este servicio puede ser sostenible económicamente. En más del 90 por ciento de los casos, tras la prestación de este, el paciente no volvió a ingresar en el hospital ni tuvo tampoco que acudir a los servicios de urgencias.
En cuanto al perfil de los pacientes del estudio, el 70,3 por ciento eran mayores de 65 años, en un 88,3 por ciento polimedicados (con más de 5 medicamentos) y en un 56,6 por ciento hombres. Las unidades en las que fueron dados de alta han sido principalmente de medicina interna, cardiología o traumatología, y todos presentaban al menos un problema de salud más y un medicamento más que cuando ingresaron.
En total, los farmacéuticos identificaron 2.515 discrepancias, lo que supone un promedio de 4,2 discrepancia/paciente, y 739 problemas relacionados con la medicación (PRM), con una media de 2 PRM/paciente. Los PRM más comunes, fueron falta de adherencia a la medicación, interacciones y falta de conocimiento del uso del medicamento. La identificación de PRM por farmacéuticos comunitarios es elevada, lo que demuestra la necesidad de un seguimiento más intenso de los pacientes en las transiciones asistenciales.
Para el desarrollo del estudio los participantes han contado con un sistema de colaboración entre niveles asistenciales, una herramienta digital que ha permitido abordar las necesidades de los pacientes que son dados de alta del hospital y de los profesionales que los atienden. Además, han contado con el apoyo constante de los Formadores Colegiales (FoCo) de los Colegios Oficiales de Farmacéuticos participantes.
El presidente de los farmacéuticos, Jesús Aguilar, ha resaltado la pertinencia de este trabajo, una continuación de la primera edición de esta investigación, desarrollada en 20016 en Avilés, Granada y Salamanca. «Demuestra la importancia de la colaboración entre farmacéuticos en todos los niveles asistenciales. En la Unión Europea, más del 10 por ciento de los efectos secundarios con medicamentos se dan en la hospitalización, yel 50 por ciento de errores de medicación se dan en las transiciones asistenciales», ha apuntado.
Por su parte, el director de Servicios Técnicos del CGCOF, Antonio Blanes, ha manifestado durante la rueda de prensa que «esta nueva investigación abre un camino importante para seguir avanzando en la concertación de una cartera de Servicios Profesionales Farmacéuticos Asistenciales, eje prioritario en la estrategia del Consejo General y los Colegios de Farmacéuticos con las administraciones sanitarias estatales y autonómicas».
Asimismo, Martínez ha añadido que «ahora es el momento de aprovechar todos los recursos del sistema y potenciar modelos cooperativos de trabajo, como el que se propone en este estudio, parar seguir avanzando en el uso responsable, efectivo y seguro de los medicamentos».