BlaBlaCar ha alcanzado los siete millones de usuarios en España y los 100 millones en los 22 países en los que opera, un crecimiento paralelo al aumento de su actividad, que ya ha superado los niveles anteriores a la pandemia, marcando su cifra récord de viajes el pasado puente del Pilar.
En concreto, entre el 9 y 12 de octubre superó en un 10% la cifra de viajes registrada en las mismas fechas de 2019 y todo apunta, según ha señalado en un encuentro con la prensa el director de operaciones España y Portugal, Florent Bannwarth, que el próximo puente de Todos los Santos se podría volver a superar los niveles previos a la crisis sanitaria.
España ha sido el primer país europeo en el que opera en recuperar y batir las reservas que se registraban en 2019. El aumento del precio de la gasolina (por encima del 22%) y el interés de los usuarios de minimizar el número de contactos con los que viajan explican su crecimiento.
La distancia media que sus usuarios recorren en cada viaje compartido es de 270 kilómetros, 14 kilómetros más que en 2020, a un precio medio de 12 euros por viaje. La Comunidad Autónoma con más usuarios de la plataforma es Andalucía, con más de 2 millones, seguida por la Comunidad de Madrid, con más de 1 millón, y la Comunidad Valenciana, con casi 900.000 usuarios.
Casi un 15% de los españoles ya es usuario de BlaBlaCar, porcentaje que se eleva al 37% en el caso de los jóvenes entre 18 y 35 años. La edad media de su comunidad ha crecido hasta los 32 años y el perfil por sexos es homogéneo: un 53% de hombres y un 47% de mujeres (47%).
Según sus estimaciones, los 100 millones de usuarios en todo el mundo han contribuido a un ahorro de 1,6 millones de toneladas emitidas al año, lo que equivale al CO2 emitido por el transporte por carretera en Valencia durante todo un año, así como a 600 millones de euros ahorrados por los usuarios.
Además de los viajes que publican sus usuarios, BlaBlaCar cuenta con una flota de autobuses que ya concentra el 20% de su actividad, sobre todo en Francia y Alemania –en España solo en trayectos internacionales debido al modelo concesional–, y baraja entrar en el sector ferroviario, aunque no como operador sino por medio de distintas alianzas.