Cuando una persona comienza a trabajar, lo habitual es que el turno de trabajo sea diurno, es decir, durante el día, esta cumplirá su jornada laboral, en sus respetivas horas; y generalmente en la mayoría de los empleos es así. Pero, resulta que en algún momento puede ocurrir, dependiendo del trabajo, que la jornada cambie, y es allí que puede el síndrome del turno nocturno.
¿Alguna vez has escuchado mencionarlo? Puede que tal vez no, y que incluso no tuvieses idea de que existiera, por ello te invitamos a que sigas leyendo y conozcas más sobre lo que es el síndrome del turno nocturno, cuales son síntomas; además de saber quiénes más comúnmente pueden padecerlo.
¿Qué es el síndrome del turno de noche?
El síndrome del turno nocturno o Síndrome Burnout, es un trastorno relacionado de manera estrecha con el hecho de trabajar en el horario nocturno, como su nombre lo indica.
Esto causa una serie de cambios progresivos como fatiga mental y física, que producen una incapacidad en las personas, para laboral en un horario normal; debido a que el esfuerzo en el trabajo, termina agotando las energías, por ello deberías consultar cuál es tu cronotipo.
E incluso, peculiarmente, este síndrome del turno nocturno, lo pueden sufrir personas que trabajan en una profesión muy vocacional, ya que se dedican, se esfuerzan y entregan por terceras personas como lo son: profesores, enfermeros, doctores, cuidadores, asuntos sociales, entre posibles y para ellos se ha solicitado la jubilación anticipada.
¿Qué permite que se presente los síntomas en el síndrome del turno nocturno?
De acuerdo a teorías médicas, en el síndrome del turno nocturno, las glándulas suprarrenales que se ubican encima de los riñones, dejan de regular las respuestas al estrés, y debido a ello se presentan los síntomas. En pocas palabras por una insuficiencia suprarrenal o la ausencia repentina de cortisol, quien regula las catecolaminas; que incluyen la adrenalina, la cual está ligada al estrés y la obesidad.
El cuerpo por rutina está acostumbrando al trabajo en el día, y al cambiar el horario por el nocturno, las glándulas acaban exhaustas, se fatigan los músculos, se pierden reflejos, las digestiones se hacen lentas y pesadas. Lo que conlleva a que incluso el sistema inmunológico se debilite, volviéndose frágil a algunas bacterias.
¿Qué posibles trastornos puede sufrir una persona que tiene el síndrome del turno nocturno?
Cuando una persona comienza a trabajar en el turno de la noche, puede sufrir de trastornos propios en muchos de los que sufren del síndrome del turno nocturno. Debido a que mayor es el riesgo de sufrir trastornos cardiovasculares, el metabolismo muestre alteraciones en las hormonas en respuesta al estrés, mayor riesgo de obesidad, hipertensión y diabetes.
Por ello, para lograr prevenir el estrés, así como los desajustes físicos y mentales, lo recomendable es pausar de manera prolongadas el horario de trabajo por varios días y de no ser posible, cambiar los hábitos de su forma de vida. Todo ello debido a que el cuerpo y mente acaban desorientados y produciendo un desajuste en el metabolismo, ya que el estrés causa tensión y dolor muscular.
Recordemos que el estrés es una reacción del cuerpo que se percibe ante un desafío, no siempre es negativo para la personas, ya que en forma de pequeños episodios, puede ser positivo e incluso ayudar a enfrentar el desafío y cumplir. Pero en dosis muy elevadas de estrés los resultados no son para nada favorables, afectando al organismo de manera increíble.
¿Cuáles son las consecuencias del síndrome del turno nocturno?
Las consecuencias del síndrome del turno nocturno pueden ser muy graves, debido a que puede llegar a originar trastornos emocionales, que obliguen a la personas a tomar medicamentos para lograr conciliar el sueño e incluso algunos contraindicados, sustancias o drogas, para mantenerse activo. También puede ser que no acuda al puesto de trabajo y disminuya la productividad y la motivación.
¿Cuáles son los síntomas del síndrome del turno nocturno?
El síndrome del turno nocturno según los expertos, se asocia al agotamiento mental, emocional y físico, que produce el trabajo, entre ellos los síntomas son los siguientes:
- Cansancio y agotamiento: padecer de cansancio extremo y no tener las energías para realizar las tareas básicas del día a día, no es bueno, y estar agotado puede deberse a no descansar lo suficiente o llevar una mala alimentación.
- Falta de realización personal: es característico del síndrome del turno nocturno que la persona, no tenga fuerzas para conseguir las metas laborales, esto puede producir una sensación de fracaso e impotencia.
- Baja autoestima: algunos casos las personas que lo sufre, presentan muy poca autoestima, debido a que se dedican al bienestar de otras personas, olvidándose de ellos mimos.
- Nerviosismo permanente y falta de concentración: el sentir una gran responsabilidad, puede provocar sentimientos de inquietud, nervios, preocupación, pánico e incluso taquicardia, además de aparecer problemas de concentrarse en situaciones que lo necesitan.
- Dolor de cabeza: cuando la personas que sufre del sindroma del turno nocturno, siente estrés prolongado, se puede producir fuertes migrañas que incluso pueden incapacitar a la persona para trabajar.
- Insomnio: no logran conciliar el sueño o no tiene sueño tras las largas horas de trabajo nocturno, y por ello recurren a la medicación. A veces puede volverse obsesivo esto y difícil luego el poder dormir sin estos medicamentos.
- Bajo rendimiento y aburrimiento: al estar estresados se pueden paralizar y no actuar bien, bajan su rendimiento e incluso se aburren en el trabajo, por la falta de interés total.
- Comunicación deficiente: muchos trabajadores entre ellos lo de, educación, sanidad y servicios sociales, requieren de la comunicación, pero cuando sufren del síndrome del turno nocturno, suelen no expresar cómo se sienten a los demás, cuando están completamente agotados: ya que ellos no quieren dejar de cumplir con su vocación.
- Irritabilidad y comportamiento agresivo: este síndrome puede desatar irritabilidad, e incluso comportamientos agresivos hacia compañeros y terceras personas.
- Absentismo laboral: en muchos casos debido al cansancio extremo la persona deja de asistir al trabajo, para lograr ahuyentar el estrés laboral y recuperarse de manera progresiva.