La salsa mandarina es una de las mejores opciones entre las salsas cítricas para acompañar el pollo asado. Gracias a su dulce sabor y al toque exacto de acidez que tiene cuando se encuentra madura, esta fruta combina a la perfección sin necesidad de añadir azúcar adicional.
Para acompañar la carne de ave, las salsas de toques agridulces son las más resultonas. Y si aunado a esto, tomamos en consideración que la temporada de máximo esplendor de la mandarina se encuentra cerca, es comprensible que se busque aprovechar su sabor. Te invito a preparar esta sencilla salsa para que acompañes el pollo asado y te deleites con su sabor.
9Variaciones de esta salsa
Usando la mandarina como base, puedes obtener una salsa que se adapte por completo a tus gustos. Tal como te he comentado, si escoges frutas pequeñas, el sabor será más amargo; ahora bien, si tus gustos particulares se inclinan hacia esos toques de sabor, elegirlas amargas es lo mejor para ti.
Puedes añadir unas gotas de tabasco si te gustan los sabores picantones y de esta forma subirle el tono al pollo al momento de comerlo. Unas hojas de romero o una hoja de laurel también contribuirán a dar más sabor a la salsa.