La salsa mandarina es una de las mejores opciones entre las salsas cítricas para acompañar el pollo asado. Gracias a su dulce sabor y al toque exacto de acidez que tiene cuando se encuentra madura, esta fruta combina a la perfección sin necesidad de añadir azúcar adicional.
Para acompañar la carne de ave, las salsas de toques agridulces son las más resultonas. Y si aunado a esto, tomamos en consideración que la temporada de máximo esplendor de la mandarina se encuentra cerca, es comprensible que se busque aprovechar su sabor. Te invito a preparar esta sencilla salsa para que acompañes el pollo asado y te deleites con su sabor.
2La mejor base para una salsa divina: unas mandarinas de calidad
Escoger unas mandarinas de buena calidad garantiza que la salsa termine siendo realmente rica y que combine de manera perfecta con el pollo.
En líneas generales, al escoger mandarinas selecciona aquellas de piel lisa y brillante. Su aroma también es importante, mientras más aromática sea, más en su punto justo de maduración se encontrara. Evita las que al tacto se sientan muy duras y cuya piel se sienta agrietada o muy estirada, pues estas tienen poco jugo en su interior.