El Directorio Ejecutivo del Fondo Monetario Internacional (FMI) ha expresado su «total confianza» en la directora gerente de la institución, Kristalina Georgieva, y ha resaltado que su examen sobre su conducta cuando trabajó para el Banco Mundial «no demuestra de forma concluyente» que «actuara de forma impropia» para favorecer a China.
«El Directorio Ejecutivo considera que la información presentada durante la revisión no demuestra de forma concluyente que la directora gerente actuara de forma impropia en lo relativo al informe ‘Doing Business’ de 2018, cuando era directora ejecutiva del Banco Mundial», ha señalado en un comunicado.
«Tras analizar todas las pruebas presentadas, el Directorio Ejecutivo reafirma su total confianza en el liderazgo de la directora gerente y en su capacidad para seguir llevando a cabo sus funciones de forma efectiva», ha dicho.
Así, ha subrayado que el Directorio Ejecutivo «confía en el compromiso de la directora gerente para mantener los más altos estándares de gobernanza e integridad en el FMI» y ha apuntado además a «su propio compromiso a la hora de apoyar a la directora gerente para mantener los más altos estándares de gobernanza e integridad en datos, investigación y operaciones del FMI».
El organismo ha hecho hincapié en que «tiene confianza en la imparcialidad y la excelencia analítica del personal del FMI y en los robustos y efectivos canales del FMI para quejas, disenso y rendición de cuentas».
Por último, ha desvelado que «planea reunirse para considerar posibles pasos adicionales para garantizar la fortaleza de las salvaguardas institucionales en estas áreas» y ha agregado que «espera seguir trabajando con la directora gerente, el resto del equipo gerente y el dedicado personal del FMI para hacer frente a los graves desafíos a los que hacen frente la economía global y los estados miembro del FMI.
La decisión ha sido anunciada después de que el órgano de gobierno del FMI se reuniera el domingo, tras haber mantenido a lo largo de la semana pasada encuentros por separado con la propia economista búlgara para conocer la versión de Georgieva acerca de las acusaciones, así como con representantes del bufete de abogados WilmerHale, responsable de la auditoría encargada por el Banco Mundial sobre las presuntas presiones de la dirección de la institución para favorecer a China.
El Banco Mundial decidió cancelar de forma indefinida su popular informe ‘Doing Business’ debido a que una revisión externa concluyó que varios altos cargos de la institución realizaron presiones al personal del organismo para mejorar la posición de China en los rankings de las ediciones de 2018 y de 2020.
El informe acusa directamente al entonces presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, y a la consejera delegada de la entidad, en ese momento Kristalina Georgieva. Según el documento, la ahora directora gerente del FMI presionó al personal del Banco Mundial para realizar «cambios específicos» en algunos datos de China para elevar su puesto en la clasificación.