Seguramente eres de las personas que ha creado un vínculo muy cercano con la báscula y quieres pesarte todos los días. A pesar de que este hábito pudieras verlo como inofensivo, la verdad es que no te lo aconsejamos bajo ningún concepto. De hecho, esta obsesión por saber cuál es tu peso actual te puede pasar factura. Mucho más de lo que podrías imaginar, por lo que la mejor opción sería que tengas algunos días en que sí te subas al aparato a fin de conocer cómo has evolucionado. Sin embargo, que lo hagas de manera cotidiana no es lo más idóneo para esa rutina saludable que llevas y ya diremos el motivo.
5Te vuelves ansioso si decides pesarte todos los días
Hay que decirlo, la ansiedad es uno de tus grandes enemigos y puede ser capaz de arruinar la dieta que llevas en cuestión de minutos. Por esa razón, pesarte constantemente puede llevarte a sufrir de ansiedad. Este estado de obsesión se convertirá en tu talón de Aquiles y priori quizás ni bajes de peso, sino que los que efectos pueden ser contrarios a los que buscas. Quiere decir que, para que alejes este estado tan oscuro es mejor que no te peses tanto. Trata más bien de sentirte cómodo con lo que estás haciendo a diario, y con lo que te llevas a la boca.