Javito García fue uno de los concursantes más queridos de las primeras ediciones de Gran Hermano. Gallego, de naturaleza espontánea y simpática, conquistó tanto al público como a sus compañeros y se convirtió en el flamante ganador de la tercera entrega del concurso. En su pueblo Laracha, en A Coruña, aquello fue un acontecimiento, hasta tal punto que el pequeño municipio instaló una pantalla gigante en la plaza del Concello para que todos los vecinos se reuniese para ver la gala final. Una gala en donde se erigió ganador con el 60% de los votos. Tras esta victoria, muchas puertas se abrieron para Javito en el mundo de la televisión, y perfectamente pudo haberse convertido en un Kiko Fernández o en una Marta López.
1DE GRAN HERMANO AL ANONIMATO
Pero Javito, cogió su premio y se olvidó de los platós. Siempre tuvo claro desde el principio que para dedicarse a la televisión, lo primero era trasladarse a vivir a Madrid, y el gallego nunca quiso una vida estresante en la capital. Además, eso de sentarse en una tertulia a comentar la crónica social es algo que nunca le ha interesado. Asegura que en realidad nunca le había interesado Gran Hermano y que se presentó al casting por una apuesta con unos amigos. Y la ganó, la apuesta y el concurso. Han pasado ya 14 años de aquello, ¿qué ha sido de Javito desde entonces?
