La Universidad de Almería (UAL) ha diseñado un protocolo que tiene por objetivo regular el derecho de los estudiantes matriculados en titulaciones de Grado, Máster y Doctorado durante el curso 2021/2022 a seguir con la docencia no presencial en caso de que tenga que guardar cuarentena por ser positivo en covid-19, tenga que aislarse por ser una persona especialmente sensible al virus o haya tenido un contacto estrecho con un positivo, siempre y cuando en este último caso haya, cuanto menos, iniciado la pauta de vacunación.
El documento, rubricado la pasada semana, recoge las condiciones que deben tener los estudiantes afectados por covid-19 para poder reclamar mediante una solicitud un sistema de formación alternativo durante el presente curso, ya sea por diez días o durante más tiempo, puesto que según reconocen desde el Vicerrectorado de Universidad Saludable, aunque el nivel de alerta ha disminuido «los casos de especial sensibilidad a la covid-19 son los mismos».
En este sentido, el documento especifica de forma concreta que las personas «sin vacunar» que hayan tenido un contacto estrecho con un positivo en covid-19 «no podrán disfrutar de las condiciones aportadas en este protocolo» a diferencia de aquellos otros contactos estrechos que sí hayan comenzado su pauta de vacunación o la hayan completado.
Así, son susceptibles de ser estimados por riesgo covid los casos positivos confirmados a través de una PCR o un test de antígenos que tengan que estar diez días en aislamiento domiciliario desde el inicio de los síntomas o desde la PDIA positiva.
También pueden acogerse a este sistema los contactos estrechos con pauta de vacunación completa, es decir, que no tienen que hacer cuarentena salvo que realizada una PDIA sean casos positivos; y los casos estrechos con pauta de vacunación incompleta que tengan que realizar diez días de cuarentena desde el contacto con el caso positivo.
El protocolo también se aplicará, una vez estudiado cada caso y admitido por el servicio de prevención de riesgos laborales, a personas especialmente sensibles que se encuentran en estado de inmunosupresión, entendido como tal a pacientes con inmunodeficiencia primaria o congénita; y pacientes con inmunodeficiencia secundaria o adquirida.
También se observa la posibilidad de ofrecer formación no presencial a pacientes con enfermedad crónica que podría afectar a la respuesta inmune, aunque deberá individualizarse de acuerdo a la historia clínica del paciente. Se incluye también a las personas bajo tratamientos con cortico-terapia a altas dosis de una semana o bajas dosis de más de dos semanas.
Los estudiantes interesados que sean casos confirmados, contactos estrechos o especialmente sensibles conforme a las especificaciones de protocolo podrán solicitar la adaptación de la docencia a no presencial mediante solicitud entregada en el Registro Electrónico General, para lo que tendrán que acompañar dicha solicitud con la documentación acreditativa –resultado de PCR, certificado de vacunación o informe médico, en su caso– y dirigirla al Área de Vigilancia de la Salud del Servicio de Prevención de Riesgos Laborales.