Ya se comienza a acercar el final de la mejor temporada de sardinas, y seguramente ya las has degustado fritas con un buen chorro de limón, asadas en la barbacoa o afogadas con la exitosa receta de Karlos Arguiñano. Para que termines de disfrutarlas en su máximo esplendor, te recomiendo prepararlas horneadas con tomate. El sabor de la salsa y la textura de la carne te dejarán enamorado; tanto, que no querrás que la temporada acabe.
2Las ventajas de la cocción en tomate
Como bien sabes uno de los peligros más graves al preparar sardinas, lo representan los anisakis; estos parásitos dañinos que hacen necesario el congelamiento de las sardinas antes de utilizarlas para poder prepararlas marinadas o en ajillo suave. El proceso debe ser de al menos uno cuatro días y es obligatorio para poder consumirlas.
La mayor ventaja de hacer las sardinas con tomate en el horno, es que acabando de llegar con ellas del mercado las puedes preparar directamente sin tener que congelarlas antes, ya que el proceso de cocción a altas temperaturas neutraliza riesgos. Además, si haces una buena cantidad y las conservas de la forma correcta, podrás disfrutarlas cuando quieras, más allá de la temporada.