Vox ha presentado una proposición no de ley (PNL) en el Parlamento de Andalucía, para su debate en el Pleno, en la que se insta a la Junta a que se tomen las medidas oportunas para acabar con la obligatoriedad del uso de mascarillas en los colegios en zonas exteriores y también en el aula, cuando ésta se pueda ventilar adecuadamente.
En la iniciativa se pide concretamente a la Junta que aplique un plan de desescalada en la obligatoriedad del uso de mascarillas en los centros educativos, que comenzaría por retirar la obligación de llevar mascarilla a menores de 12 años, tanto en interiores, siempre que haya buena ventilación, como en exteriores de la escuela, y a todos los alumnos en exteriores, debiendo ir aumentando esa mínima hasta retirarla para todos los alumnos, si las condiciones epidemiológicas lo permiten.
Se pide además que la administración autonómica complemente esta medida con el impulso de planes, acuerdos, normativas, leyes y otras iniciativas legislativas relativas al impulso de la ventilación de las aulas en los centros escolares.
Según expone Vox en su iniciativa, mientras que la mayoría de países europeos han comenzado el curso con un plan de relajación del uso de mascarillas para niños, o incluso han desechado directamente su uso, el Gobierno español «ni siquiera lo ha estudiado» y «no tiene ningún plan para acabar progresivamente con la imposición de las mascarillas en las escuelas y, si seguimos la lógica de toda su política hasta este momento, no lo impulsará hasta que no pueda utilizarla como propaganda segura».
En este mismo sentido, critica que la Junta de Andalucía no haya considerado tampoco la eliminación de las mascarillas en los menores de 12 años entre las medidas necesarias para la reanudación del curso escolar, por lo que se pone de manifiesto que ninguno de los gobiernos «ha estado dispuesto a preocuparse por los menores, por su educación y por su salud«.
Para Vox, «no tiene sentido cargar sobre los más pequeños las medidas sanitarias más rigurosas cuando no existe evidencia científica que justifique que éstos deban llevar obligatoriamente la mascarilla en el colegio». Apunta que las probabilidades de infección, hospitalización e ingreso en UCI son mucho más bajas en niños que en adultos, la letalidad es insignificante y su tasa de transmisibilidad es cuatro veces menor que en la edad adulta.
Por ello, según este partido, «a causa de que el Gobierno de la nación no decide proveer de mascarillas a toda la población de manera gratuita, pero al mismo tiempo obliga a los padres a comprárselas a sus hijos para que puedan llevarlas cada día a la escuela, existe la urgente necesidad de relajar la obligatoriedad para su uso de inmediato«.
«La imposición del uso continuado de la mascarilla en niños podría ser contraproducente y afectar al desarrollo de los menores. De este modo, el uso inadecuado de mascarillas, que es especialmente probable entre niños pequeños, puede llevar a la autocontaminación y a otros perjuicios», según alerta Vox.