Muchas veces al comprar un buen pan, terminamos con una buena cantidad de este, que, necesariamente debemos congelar para disfrutarle en otro momento. Si vas a comerlo al día siguiente quizás optes por simplemente envolverlo bien y dejarlo a temperatura ambiente; mientras que, si vas a disfrutarlo en algunos días más, la opción más recomendable es congelarlo.
Hay formas de disfrutar del sabor fresco del pan así este haya estado congelado. Conservándolo de la manera correcta y poniendo en práctica un sencillo truco, podrás degustarlo como recién comprado.
5Cómo es mejor guardarlo: ¿entero o rebanado?
Cuando se investiga la opinión de los panaderos y de los más conocedores del tema, todos coinciden en que lo mejor es cortar el pan en rebanadas antes de congelarlo. Las razones de esto son muy claras y también bastante lógicas.
La primera ventaja es que puedes recurrir a descongelar solamente las porciones que vas a comer, lo que representaría un mejor aprovechamiento del pan. Por otra parte, si están cortadas en rebanadas, tienes la posibilidad de llevarlas directamente al tostador y disfrutarlas de una vez.