¿Sufres de calambres de vez en cuando o incluso con regularidad? Muchas personas tienen calambres en los brazos, piernas y pies; la mayoría en las pantorrillas. En principio, sin embargo, pueden ocurrir en todo el cuerpo.
Y no importa dónde, causan un dolor insoportable durante minutos. Los calambres musculares nocturnos, que literalmente nos privan del sueño, son particularmente incómodos.
3Las causas de los espasmos musculares
- Músculos con exceso de trabajo: Si entrenas duro más allá de tus límites y no permites que tu cuerpo se regenere, rápidamente tendrás calambres musculares. Lo mismo ocurre con el ejercicio excesivo después de largos descansos del entrenamiento.
- Falta de líquidos o minerales: Los minerales, especialmente sodio, potasio, calcio y magnesio, son fundamentales para la actividad muscular. Disueltos en los llamados electrolitos en el agua corporal, transmiten señales nerviosas a las células musculares. Los músculos se acortan o se estiran según sea necesario.
- Estilo de vida sedentario: Dos tercios de los europeos se mueven menos de una hora al día. Además, el trabajador de oficina típico se sienta rápidamente hasta 12 horas al día. Además de las enfermedades cardiovasculares y metabólicas y el dolor de espalda, las consecuencias de esta falta de ejercicio son la alteración de la circulación sanguínea en las piernas. Y donde no va la sangre, tampoco van los minerales. Los calambres en las pantorrillas y los pies por la noche son prácticamente inevitables.
- Otros factores de riesgo: El alcohol es muy diurético y, por tanto, drena nuestro organismo. Esto da como resultado una falta de líquidos y minerales, un criterio absoluto para la actividad muscular adecuada.