Luego de una temporada complicada del Real Madrid, en la que solo se llevó la Supercopa de España, los fichajes llegaron y el de Guerschon Yabusele, en particular, se ha convertido en toda una sensación. El francés ha cuajado un inicio espectacular, tanto que en poco tiempo se ha alzado como una de las estrellas del conjunto blanco. Con Pablo Laso encantado con su rendimiento, el público gozando de sus actuaciones y el equipo aprovechando su magia, el jugador galo ya tiene a todo el madridismo como tal en el bolsillo.
Claro que al comienzo de campaña todos estaban esperando esos ansiados cambios dentro del Real Madrid para tratar de llevarse todo una vez más; aunque lo que más ilusión hacía eran los fichajes. La gran mayoría quedaron encantados con la llegada de Thomas Heurtel, Williams-Goss y Adam Hanga; más aún porque al francés y al húngaro se los estaban quitando al Barcelona. No obstante, el cuarto fichaje, el de Guerschon Yabusele, era el menos conocido de todos; pero la realidad es que «El Oso Bailarín», como lo conocen en el mundo del baloncesto, se ha logrado colar en el sentimiento de todos los aficionados merengues con su gran talento. Aquel chico de Francia ha recorrido un largo camino y, de momento, ha encontrado su lugar en el Real Madrid.
1Un francés muy veloz
Para conocer a Guerschon Yabusele hay que remontarse hasta el 17 de diciembre de 1995, fecha en la que el Ala-Pivot nacería en Francia, en la localidad de Dreux; allí se había instalado su familia luego de emigrar desde el Congo. La verdad es que ese chico ha crecido hasta llegar a los 2,03 metros y a pesar 125 Kg, aproximadamente. Sin embargo, lo que más impresiona del jugador galo es que tiene una facilidad para moverse y una gran versatilidad; unas aptitudes que generaría en sus inicios en otros deportes.