El consejo de administración de Renfe ha aprobado el inicio del proceso de adquisición y mantenimiento de 12 locomotoras eléctricas de gran potencia, más un máximo de 6 opcionales, por un valor total de 178 millones de euros, con las que pretende impulsar el transporte de mercancías por ferrocarril.
Con la adquisición de estas locomotoras, que supondrán una mayor capacidad de carga y mejores niveles de fiabilidad, Renfe Mercancías pretende incrementar su actividad y su cuota en el transporte por ferrocarril de mercancías, elementos que considera «claves» para la internacionalización de la compañía.
Asimismo, el incremento de la actividad de Renfe Mercancías conllevaría significativos ahorros de costes por externalidades en tanto que, tal como reconoce la Comisión Europea, el ferrocarril es el modo de transporte de mercancías que menos emisiones contaminantes genera.
En 2020, los transportes que realizó Renfe Mercancías supusieron un ahorro para la sociedad de 291 millones por costes externos y evitaron la misión a la atmósfera de 850.000 toneladas de CO2, así como el consumo de 425.000 toneladas equivalentes de petróleo.
CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS
Las locomotoras, que se construirán en ancho UIC tipo Co’Co’, se destinarán a circular por líneas electrificadas tanto de la Red de Interés General como por las de la sección internacional de la línea Figueres Perpignan, así como por la red convencional francesa.
En el futuro, podrán circular asimismo en el Corredor Mediterráneo donde, como consecuencia de las obras que se están realizando para implantar el ancho UIC en vías generales, vías de apartado y apeaderos, se prevé la posibilidad de aumentar la longitud de los trenes de mercancías hasta un máximo de 750 metros.
También podrían circular también por líneas electrificadas de la red de ancho convencional (1.668mm) mediante el procedimiento de cambio de ejes.
Las locomotoras que se construyan deberán ser tritensión, siendo aptas para funcionar con tensiones nominales de alimentación de 3 y 1.5 kV en DC y 25 kV en AC, capaces de alcanzar una velocidad máxima de, al menos, 120 Km/h y de remolcar una carga de, al menos, 1.800 tn en rampas de 18% a una velocidad mínima de 50 km/h.
En lo que respecta a los Sistemas de Protección de Tren, deberán estar equipadas con los de Supervisión Continua de Velocidad ERTMS/ETCS (European Rail Traffic Management Systemn) embarcado, niveles 0, 1 y 2, así como ASFA Digital para España y RPS (cocodrilo) y KVB para Francia.
En cuanto al sistema de comunicación, será GSM-R (voz y datos) y Tren Tierra analógico compatible con las líneas españolas y francesas. Las ofertas deberán incluir un sistema ‘last-mile’ para circular por secciones de vía no electrificada.