Después de semanas en horas bajas, el FC Barcelona se ha reactivado de forma espectacular y contra el Levante dio señales de vida que desde hace muchos partidos no daba. Una goleada (3-0) que dejó un mensaje claro para todos: la ilusión nunca se irá. El equipo sabe que no pasa por su mejor momento, que ha perdido potencial y que necesita tiempo para levantarse; sin embargo, con este triunfo frente al equipo valenciano vuelve una sonrisa que se creía ya perdida. Por supuesto que los títulos serán muy difíciles de conquistar; pero nadie puede dudar de que no lo intentarán.
Cada día que pasa va animando más y más a toda una fanaticada culé que ve como un equipo lleno de problemas tanto institucionales como deportivos sigue luchando por estar allí en la pelea de todas las competiciones. Con una deuda enorme, con el malestar de haber perdido a su gran estrella, con el golpe de realidad que les dio el Bayern Múnich en Champions League, con los pleitos entre Joan Laporta y Ronald Koeman y con los empates recientes en Liga que los han alejado de la cima; lo cierto es que el Barcelona tiene que resolver muchos asuntos, pero hay algunos motivos para soñar con que se pueden lograr cosas importantes esta campaña.
1Ansu Fati volvió con todo
Entre los motivos que da más fuerza a los blaugranas para creer en que todavía se pueden lograr cosas importantes, el retorno de Ansu Fati a los terrenos de juego está entre las primeras razones. Al canterano le bastaron solo 10 minutos en el terreno de juego para demostrar su desparpajo, su habilidad, ese poder para combinar con sus compañeros y, sobre todo, su gran talento para el gol. Ansu Fati no solo lleva el «10» en la espalda, también ahora tiene la ilusión de todo un Barcelona que se encomienda a él como su gran talento. Si bien hay que ir lento, pues viene de cuatro operaciones en la rodilla, su juventud y su calidad auguran a que solo puede seguir creciendo.