Escuchar decir a muchos que estarán pendientes de la IndyCar este fin de semana, solo por Álex Palou hace que otros tantos giren la cabeza extrañados; porque con la batalla tan emocionante que se avecina en el GP de Rusía de la Fórmula 1, ralamente no parece dejar cabida para nada más emocionante en el mundo de automovilismo. Sin embargo, en la madrugada del domingo al lunes son varios los que estarán atentos a un hecho histórico, pues ese piloto catalán está cerca de llevarse el título de IndyCar; algo que ningún español ha logrado hacer jamás.
Con algo histórico ya se puede comprender como es que el nombre de Álex Palou se está empezando a escuchar; no obstante, su gran calidad, talento y buenas manos lo han convertido en todo un atractivo, que a pesar de tantos viajes y vueltas que ha dado ya comienza a asentarse en la élite del mundo del automovilismo. Por supuesto que esto solo lo conseguirá si logra un buen resultado en su última carrera de IndyCar; pero la verdad es que, sea como sea, poder hacerse un hueco en el imaginario español en una competición que no es tan atractiva como la Fórmula 1 y con ortos grandes, de verdad es un gran logro para este chico de 24 años que ha sabido reinventarse a lo largo de su historia para seguir creciendo.
5Nunca tomar riesgos innecesarios
Si bien en el 2018 las cosas habían mejorado, al punto de que varios equipos importantes se interesaron en él; lo cierto es que Álex Palou no quiso tomar riesgos inncesarios que lo alejaran más de la meta de llegar a la Fórmula 1. Así que frente a la perspectiva de entrar a la cantera de Red Bull y perderse en la intrascendencia decidió tomar una vía mucho más difícil; por lo que, aconsejado por Campos, se lanzó a la aventura de la Super Fórmula Japonesa.