El Atlético de Madrid alcanzó un nuevo triunfo en LaLiga Santander, esta vez ante el Getafe, y uno de los protagonistas volvió a ser Antoine Griezmann. Tras unas duras negociaciones, que solo se pudieron concretar a última hora en el último día de mercado, el francés arribó a la que fue su casa desde 2014 hasta el 2019. Pese a que muchos dudaron de que se llevara a cabo esta contratación, el conjunto colchonero lo trabajo hasta el final, pues era una petición expresa de un Diego Simeone que veía clave su llegada. Sin embargo, con cuatro partidos ya disputados, este no ha hecho nada diferencial y son muchos los que ven que condiciona al equipo rojiblanco.
Pese a que en el club lo celebraron y que Simeone casi haya montado una fiesta nacional, la verdad es que para la afición está siendo mucho más difícil aceptarlo, por todo lo que sucedió con su salida, principalmente; pero además de eso por todo lo que condiciona con su llegada. La fluidez de juego, futbolistas desplazados, algunos que se quedan sin minutos y problemas en el juego del equipo, son algunas de las cosas que se han visto desde que llegó y de las que Simeone tendría que tomar nota para que, de no mejorar pronto, pueda dejarlo a un lado hasta que recupere su nivel.
2Dos años sin lograr casi nada
Cuando todo prometía que sería color de rosas para Griezmann, que declaró que se iba al Barcelona para ganar los títulos importantes que en el Atlético de Madrid no podría, el conjunto azulgrana cayó en una desgracia tas otras. Su rendimiento en su primer curso fue muy irregular y todo lo coronó con ese 2-8 del Bayern Múnich que los eliminó de la Champions League y los dejó sin ganar ni un solo título en la temporada. Después, en el curso 2020-2021 solo mejoró un poco, pues pudo hacer más goles; pero no alcanzó nunca el nivel que exhibió de rojiblanco y eso en el Barça nunca se lo perdonaron. Al final solo pudo ganar la Copa del Rey como blaugrana, mientras el club no ganaba trofeos importantes se llevó LaLiga Santander sin él. Dos años para el olvido.