El Papa ha trazado ante el Consejo de Cardenales que le asesora en la reforma de la Curia Romana el perfil de Iglesia alejada del «clericalismo y la rigidez» que le gustaría que saliese del próximo Sínodo sobre la sinodalidad, que concluirá con la celebración de la XVI Asamblea de los Obispos en octubre de 2023 en el Vaticano.
Francisco ha puntualizado que el centro de la reflexión no es tanto la profundización en ‘este o aquel’ tema, sino el aprendizaje de una forma de vivir la Iglesia, marcado a todos los niveles por la escucha mutua y la actitud pastoral, sobre todo, frente a «las tentaciones del clericalismo y la rigidez», según ha informado el Vaticano.
El encuentro ha tenido lugar a las 16.00 horas y ha durado dos horas. Debido a la actual situación sanitaria por la pandemia del coronavirus, el encuentro ha sido virtual. De hecho, el Vaticano ha difundido varias fotografías del encuentro en el que se ve al Papa sentado en su despacho ante una pantalla donde puede observarse a todos los cardenales que forman parte de este grupo.
«Francisco ofreció una reflexión sobre la apertura de los trabajos del próximo Sínodo sobre la sinodalidad», señala la Santa Sede que recuerda que este Sínodo concluirá con la celebración de la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos en octubre de 2023 sobre el tema ‘Por una Iglesia sinodal: comunión, participación y misión’.
En su intervención, el Papa ha recordado dos de sus discursos identificados como centrales en sus ideas sobre el próximo Sínodo: el de 2015, con motivo del 50 aniversario de la institución del Sínodo de los Obispos y el más reciente dirigido a los fieles de la diócesis de Roma el pasado sábado.
Por su parte, durante las intervenciones, los distintos cardenales han profundizado en algunos aspectos que hacen especialmente necesario el camino sinodal en las tierras de las que proceden, para superar el sectarismo y los intereses partidistas, según informa el Vaticano. La próxima reunión del Consejo de Cardenales tendrá lugar en el mes de diciembre.