Casi un 20% de pacientes de cáncer no fueron diagnosticados durante el año 2020 en España; durante 2021 la actividad quirúrgica en pacientes oncológicos sigue sin recuperar el nivel de 2019, y el número de pacientes que inicia un nuevo tratamiento farmacológico disminuyó un 5% en 2020 frente al año anterior, según un informe presentado este martes que alertan sobre el impacto de la pandemia en todas las fases de la enfermedad.
En el marco del encuentro ‘El Cáncer No Espera’, organizado por IQVIA, se ha presentado este informe que concluye que «el cáncer pronto se convertirá en una emergencia, como lo ha sido la pandemia». «Si no damos pronto con los pacientes aún no diagnosticados por la pandemia, entonces el sistema sanitario se enfrentará a pacientes que debuten con una enfermedad más avanzada y/o con peor estado de salud», señala.
En España las cirugías programadas de estos pacientes oncológicos que no se llevaron a cabo ascienden a más de 31.000 frente a datos del 2019. El Ministerio de Sanidad español publicó en febrero de 2021 algunas iniciativas para afrontar el reto que ha supuesto la pandemia y garantizar un sistema sostenible a largo plazo y que pretenden mejorar la eficiencia del sistema sanitario centrándose en maximizar el uso de los recursos y garantizar al máximo la continuidad de los servicios sanitarios y la investigación clínica.
Isabel Ricote, manager de oncología en IQVIA, destacó que «según fuentes internas disponibles en IQVIA, se estima que desde el inicio de la pandemia COVID se han diagnosticado 62.000 pacientes oncológicos menos de lo esperado según referencia de 2019. Esto tendrá claras consecuencias tanto en la supervivencia a medio y largo plazo, como en el aumento de la complejidad del manejo terapéutico de estos pacientes».
Durante la mesa redonda celebrada en el encuentro, Mariluz Amador, directora médica de la AECC, ha señalado que «es prioritario animar a la gente a que acuda a la consulta ante la aparición de síntomas, ya que muchos indicadores confirman que muchos pacientes no acuden a consulta por miedo a la COVID-19, incluso una vez pasado el colapso del sistema».