La probabilidad de depresión aumenta con una dieta poco saludable. Se ha demostrado que la comida rápida ataca el cuerpo y puede provocar inflamación.
11Antojos, fatiga, aumento de peso
La combinación de alto contenido de azúcar y bajo contenido de fibra hace que nuestros niveles de azúcar en sangre se disparen después de «consumir» comida chatarra y luego bajen de nuevo rápidamente. El resultado: antojos, fatiga y aumento de peso.
Además, la comida chatarra ralentiza nuestro metabolismo, interrumpe la digestión y reduce la sensación de saciedad a pesar del exceso de calorías.
Pero no solo los efectos inmediatos de la comida chatarra son negativos. A largo plazo, también crea problemas. La obesidad, la diabetes, la presión arterial alta, el estrechamiento de los vasos sanguíneos y un mayor riesgo de ataque cardíaco y accidente cerebrovascular son algunos de los numerosos efectos negativos que conlleva el consumo prolongado de comida chatarra.
Además del posible daño físico, la comida chatarra también afecta nuestra capacidad intelectual y nuestra psique. Te vuelve olvidadizo, letárgico y posiblemente incluso depresivo.