El FC Barcelona parece estar abocado a la ley de Murphy, que dice que si algo puede salir mal, pues empeorará. Eso es lo que pasa tanto con Joan Laporta y Ronald Koeman, que desde hace rato se sabe que no tienen una buena relación, pero se esfuerzan tanto en ocultarlo que quedan mucho peor; y también con un equipo que no levanta cabeza y tal parece que se ha convertido en socio exclusivo de dar pena allá por donde va. Por supuesto que de exageraciones esta lleno el mundo; no obstante, que cada tres días se discuta el futuro del entrenador no es normal y además que el conjunto azulgrana tenga dos partidos malos en el Camp Nou es aún peor.
Ante tantos males en el Barça son muchos los que se cuestionan como Koeman continúa al frente del equipo; por eso comienzan a ponerse de lado de esos directivos, un tanto palmeros de Laporta, que piensan que la mejor soluciones despedir al neerlandés de una vez por todos. Esta es una opción que se baraja desde hace tiempo; la cuestión es que mientras más solida se hace la idea, más complicada se torna hacerla realidad. En estos momentos el mandatario azulgrana se encuentra en una difícil situación y aunque no lo parezca la solución puede acabar siendo más grave que la enfermedad; porque sacar a Koeman traería otros problemas.
3Laporta se encuentra en una encrucijada
Al ver ese panorama que dejó Bartomeu, ahora se entiende el problema en el que está metido Laporta, pues está en una gran encrucijada si despedirlo ahora o renovarlo para no pagarle esa cantidad de dinero que nunca estaría destinado para darle al entrenador. La indecisión del presidente azulgrana crece, aunque tal y como van las cosas no sería nada descabellado esperar; pero ya sea por lo deportivo o el dinero que se tenga que pagar, el Barça va salir perdiendo en esto.