La temporada arrancó y por ahora el Real Madrid que comanda Florentino Pérez no puede estar más satisfecho por como van las cosas. Ocupando el liderato de LaLiga Santander de forma solitaria (a la espera de lo que haga el FC Barcelona), ganando su primer duelo en la Champions League y, como parece, habiendo recuperado el potencial goleador que habían perdido con Zinedine Zidane en las últimas campañas, en las que ya Cristiano Ronaldo ya no está. La verdad es que Carlo Ancelotti ha logrado levantar las cosas cuando muchos pensaron que llegaba para cometer los mismos errores del pasado; sin embargo, hay algunas cosas que tienen pensando al madridismo, pues no van tan bien como deberían.
En defensa claramente el equipo deja mucho que desear; ante alguna eventualidad con Casemiro no parece haber nadie que lo sustituya o por lo menos no uno en el que Ancelotti confíe plenamente; y además todo luce muy complicado con algunos futbolistas que parecen haber desaparecido del radar del técnico italiano. Si bien con algunos se esperaba que se tomara esas medidas, pues su hora de seguir en el Real Madrid ya está llegando a su fin (Marcelo, Isco…), con otros preocupa mucho debido a que eran grandes esperanzas del club. Y es que uno de los fichajes de Florentino Pérez con más talento de los últimos años está pasando por horas bajas y no hay síntomas de que vaya mejorar pronto. Este no es otro que un Marco Asensio que poco a poco se ha ido quedando fuera de los planes de Ancelotti.
9Ese sentimiento de la lesión lo quiere dejar atrás
De cara a la campaña 2019-2020, Asensio sufrió una rotura del ligamento cruzado anterior y del menisco externo de la rodilla izquierda en un duelo de pretemporada. A partir de allí, todas las esperanzas que habían puestas en ese balear que Florentino Pérez logró llevarse para el Real Madrid antes que otros equipos se apagaron. Sin embargo, el mallorquín volvió casi un año después y lo hizo con gol y una sonrisa. Ya habiendo pasado más de un año de ese retorno y dos de la grave lesión, Asensio quiere dejar todo eso en el pasado de una vez y recuperar la confianza que todos tenían puesto en su talento. En una nueva posición le costará, pero el mallorquín no piensa rendirse.