Podemos definir la siesta como un “sueño corto o descanso después de la comida del mediodía”. Los españoles tenemos fama de ser el pueblo inventor de la siesta, el término viene en realidad del latín, de la hora sexta romana, que era al mediodía, cuando hacía más calor y los romanos lo combatían descansando y durmiendo. Posteriormente, ya en la Edad Media, la orden monástica de San Benito del s. XI incluía entre sus normas la de acostarse en silencio durante la hora sexta (entre las dos y las tres de la tarde).
4Un modo sencillo de aumentar tu rendimiento
Otro de los beneficios es que aumentarás tu rendimiento. Eso quiere decir que aunque pienses que estás perdiendo el tiempo esa media hora, lo recuperarás con creces a lo largo del resto del día. Y es que una siesta ayuda a tu cerebro a retomar fuerzas. La NASA realizó un estudio entre sus pilotos y astronautas descubriendo que una siesta de unos 40 minutos les ayudaba a mejorar su rendimiento un 34%, manteniéndose además en pleno estado de alerta.